El Arroyano participa un año más en Salón Internacional del Club de Gourmet en la confianza de que las especiales circunstancias por las que atraviesa la economía han servido para que esta empresa heredera de más de 90 años de tradición jamonera se reinvente por completo. De hecho, acaba de crear dos puestos de trabajo para los departamentos de calidad e I+D+i. De la misma manera, ya está en proceso de selección un nuevo profesional para la sección de Márketing. En total tres empleos. "Tenemos una empresa nueva, fortalecida tras las situaciones vividas en estos últimos tiempos y ahora ya por fin nos comemos el mundo", asegura Vidal Julio Ramos, consejero delegado de Herlusa, empresa elaboradora de los productos El Arroyano, que se ha caracterizado siempre por andar el camino despacio pero muy seguro, enseñando a disfrutar lo más selecto de nuestra producción porcina. Fruto de esta nueva etapa es un proyecto de colaboración de Herlusa con el Centro Tecnológico de Investigación Alimentaria del Valle de los Pedroches (Cicap) al objeto de desarrollar un kit que detecte si las carnes tienen toxoplasma. La toxoplasmosis puede causar infecciones leves y asintomáticas, pero también como infecciones mortales especialmente peligrosas para las mujeres embarazadas, recién nacidos, ancianos y personas inmunodepresivas.

En abril comienzan las primeras investigaciones para desarrollar este kit que permitiría a estos grupos de riesgo consumir con total tranquilidad todo tipo de embutidos y jamones. La innovación ha sido siempre una de las señas de identidad de El Arroyano que ha recibido distintos reconocimientos por su innovación tecnológica alimentaria.