¡No,

en absoluto!

Me hubiera gustado conocer la identidad del señor "B. López", pues de esa manera me hubiera permitido la licencia de enviarle a dicho señor un escrito privado, para decirle que no, en absoluto, por el mero hecho de ser de Cáceres no se es más que nadie, es sencillamente "ser de Cáceres", sin ningún añadido más, sin afán peyorativo alguno, sin buscar ninguna otra interpretación de ningún tipo, sin ninguna comparación con otras situaciones, y le hubiera dicho también que "ser de Cáceres de toda la vida" significa eso, justamente lo que dice y es de Cáceres, o de cualquier otro pueblo. Una persona, cuando habiendo nacido o no en ese sitio, lleva mucho tiempo de su existencia trabajando, viviendo en ese lugar, ni más, pero tampoco menos.

Me hubiera gustado, digo, enviarle al señor "B. López" un escrito privado, porque este que estoy utilizando, si bien como persona tengo el mismo derecho que todos para hacerlo, no lo creía yo el más conveniente dada mi condición de alcalde de todos los cacereños y dada mi condición de candidato del PP en las próximas elecciones del 25 de mayo.

Pero, dado que el citado señor en un escrito, a mi juicio correcto desde la perspectiva del interesado, y dado que el citado señor se manifiesta no votante del PP (en democracia cada uno elige lo que cree más conveniente), me he permitido utilizar este medio contando con la generosidad del señor director de el Periódico EXTREMADURA, que espero tengo a bien autorizar la publicación de estas líneas en sus Cartas al Director. Ser de Cáceres no es excluyente de nada, muy al contrario, es hacer público un honor y una honra, un conocimiento y una identificación, que en mi caso tengo el placer de compartir con todas aquellas personas que diariamente hacen posible esta ciudad.

JOSE MARIA SAPONI.

Alcalde de Cáceres

Reflexión sobre

Sierra de Fuentes

Sierrafuenteños, es momentos que reflexionemos todos sobre los últimos acontecimientos que están ocurriendo en nuestro pueblo. Se está inculpando a una persona que su único delito ha sido hacer una defensa que ha basado en el entorno, sobre la denuncia que le han puesto. Deberíamos ponernos en su lugar y preguntarnos qué habríamos hecho nosotros si hubiésemos sido el denunciado.

Al señor alcalde, decirle que no utilice su cargo público para hacer un juicio popular, culpando a esa persona de denunciar las ilegalidades existentes y queriendo desviar la atención y enjuagar sus culpas, cuando es usted el que hace una denuncia en firme a todo lo ilegal existente en el término de nuestro pueblo con las nuevas normas subsidiarias, firmadas por usted y su equipo de gobierno; desde mi posición de ciudadano, respeto este hecho aunque no lo comparto, pero usted debe admitir su culpa y responsabilidad. Desde aquí pido el apoyo de todos los vecinos hacia esta familia, a la que están destrozando, pues en los momentos difíciles es cuando hay que demostrar la humanidad.

GREGORIO GUERRA MONROY

Sierra de Fuentes

Pancarta

y estética

Manolo: leo atónito tu carta al director del día 24. Acabas diciendo, y todo debido a la estética de una pancarta, que "por ahí no paso". Me temo que vas a tener que pasar por ahí. Lamento decirte que, aunque no te guste, vivimos en una democracia en la que tienen cabida otras ideologías además de la liberal, otras creencias además del integrismo, otras posturas ante la guerra además de la belicista, otras estéticas además de la del oropel.

La pancarta GUERRA NO llevaba colgada en nuestros balcones desde el inicio de la guerra. No era nuestra intención ofender a nadie, sino manifestar nuestro rechazo a la guerra. El 14 de abril intentaron, sin lograrlo, quitárnosla de mala manera y eso sí que es una provocación. Nuestra respuesta fue poner la correspondiente denuncia de los hechos y colgarla de nuevo. Tú me llamaste para solicitar que retirara la pancarta "por razones estéticas" casualmente media hora después del intento de robo. Tu respuesta ha sido la carta aludida en la que, además de omitir intencionadamente lo que sabías, me acusas de provocación. Tú no eres liberal, eres un maleducado y un tiquismiquis.

FERNANDO SERRANO SAN PEDRO

Plasencia