He leído un artículo sobre un futuro sin humos y me han llamado la atención las más de siete millones de muertes prematuras que puede provocar la contaminación. Entiendo que una muerte prematura es la que se produce antes de tiempo en una persona sana, no en alguien que por sus malos hábitos o enfermedades congénitas muere antes de una edad considerada normal. Si una persona muere atropellada o por un accidente de tren eso sí es una muerte prematura; si esta persona bebe en exceso o come sin medida y desde que nació padece asma esta muerte no es prematura. La contaminación afecta a la salud, pero no es el motivo de una enfermedad y menos de la muerte, es un agravante. ¿No deberíamos hablar de todos los factores de la contaminación? Se habla mucho de los coches, pero generalizando, derivando el problema al ciudadano de a pie y sin profundizar. ¿Se tiene en cuenta el trasporte de mercancías? ¿Y los taxis o similares? ¿Y el transporte comercial o el turístico? También cabe plantear la escasez de transporte público y su coste; quizá si existiese la mayoría de la gente no usaría su coche. Y otros factores: las industrias, los puertos, aeropuertos, los vertidos de muchas industrias en el aire, en el suelo y en el agua, sin olvidar la agricultura y la ganadería y, respecto al coche eléctrico, su efectividad medioambiental dependerá de la procedencia de la electricidad producida. Aquí en España estamos a años luz de tener una energía limpia renovable y dudo que la red sea capaz de producir y suministrar a un parque compuesto solo de coches eléctricos. Dejemos de culpar directa o indirectamente al ciudadano y enfrentémonos a este problema.