Abogada

Por respeto a su persona, y porque con el anonimato se protege su identidad, no voy a decir su nombre, pero sí su pesadilla. Es una de esas tantas viudas del terrorismo que se ha tenido que enfrentar a una muerte, a la indiferencia de mucha gente y al egoísmo de otros tantos.

Fue viuda, segunda viuda de un policía muerto. La anterior esposa del fallecido era más proclive a Herri Batasuna que a la propia causa de la muerte de su marido. Durante años permaneció inactiva en dicha causa; pero un día, y conociendo que el gobierno --por la Ley de Víctimas del Terrorismo-- iba a indemnizar a las familias, entra en juego, y quiere beneficiarse de lo que esta sociedad "españolista" le brinda a partir de ahora.

En este caso hubo sentencia, en un procedimiento en el que esta segunda viuda se personó, quería mirar de frente a Valentín Lasarte, --imputado en el asesinato de su marido--.

La primera esposa, en cambio, obvió participar en hacer justicia, asumía el precio político de la muerte de su entonces ya exmarido. Pero sucede que se fija una alta indemnización, indemnización que, de acuerdo a la mencionada ley, el Gobierno español ha de dar a la que el fallo de la sentencia reconoce.

Y aquí aparece el problema. Aquélla que rehusó enfrentarse a Valentín Lasarte, ahora quiere exigir que le dé una parte del dinero cobrado. Y este nuevo suplicio recuerda a esta militante contra el terrorismo que su causa ahora no solamente está en procesar a los otros encausados, sino en defenderse de una abertzale que quiere la pasta por encima de todo.