El título de este artículo lo he tomado de una ponencia presentada por Joaquín Coello , presidente de la Autoridad Portuaria de Barcelona, en el 4.º Forum Mediterráneo de Logística y Transporte. En esa misma ponencia dijo también: "España debe ser una zona potencialmente preferente como Plataforma Intercontinental", "Africa y el Mediterráneo tienen un gran potencial de desarrollo".
Todo ello debe hacernos reflexionar: ¿Puede Extremadura en general, y Cáceres en particular, hacer algo para verse implicada y favorecida en todo ese potencial desarrollo? Mi opinión es que sí y que, además, estamos ante una oportunidad histórica en la que alguna de las decisiones que se están estudiando en este momento, como la ubicación del Aeropuerto de Cáceres y las de las estaciones del AVE, pueden condicionar en una u otra dirección esa participación.
XLA PENINSULAx Ibérica es como una gran plataforma europea avanzada hacia el océano Atlántico y hacia Africa y debería, por tanto, ser la entrada natural de mercancías y personas provenientes de estas dos grandes áreas geográficas; y así fue durante un largo periodo en el que los puertos de Lisboa, Sevilla y Huelva acaparaban la mayor parte de los intercambios. Posteriormente, en los siglos XVIII y XIX, este flujo se desvió hacia el norte de Europa; primero hacia los puertos ingleses y, posteriormente, hacia los holandeses y alemanes, para facilitar su distribución en la zona central europea. Hoy, los puertos del Norte de Europa representan el 70% del tráfico marítimo intercontinental, frente a sólo un 30% de los puertos del Sur. Esta situación puede y debe variarse si se estructura en la Península Ibérica una red eficaz de transporte y logística que facilite la llegada de las mercancías a las zonas de consumo de manera rápida y económica.
En los últimos años se han realizado dos importantes inversiones portuarias que facilitan de forma trascendental este desplazamiento de los ejes logísticos hacia el Sur: ell puerto de Sines (Portugal), el de mayor calado de toda la cornisa occidental europea, y el macro-puerto TangerMed (Marruecos), que será el mayor puerto de la cuenca Mediterránea.
Desde la caída del Muro de Berlín en 1989, Europa ha vivido tres lustros de huida hacia el Este. La mayor parte de las industrias han realizado ingentes inversiones en estos países: primero fueron Hungría y Chequia, después Polonia, Rumanía y los países de la antigua URSS. Este proceso parece que se está, cuanto menos, ralentizando. Las rápidas subidas de los costes salariales y la limitación y a veces escasez de mano de obra, ha hecho que algunas empresas importantes hayan comenzado ya a replantearse su estrategia. El caso más significativo lo tenemos con Renault, que ha decidido realizar su próxima gran inversión cerca de la ciudad de Tánger, donde prevé fabricar ¡400.000 vehículos/año! en un horizonte de 2012. Detrás del fabricante francés se han anunciado ya otros grandes proyectos, como el del fabricante de componentes Delphi, que el pasado año desmanteló sus dos plantas de Cádiz para fabricar los componentes en Rumanía, pero que, a la vista de las dificultades que están teniendo, ha anunciado ya dos nuevas plantas también en Tánger, que emplearán a más de 3.000 personas.
Todo esto permite pensar que el Norte de Africa puede constituirse en un nuevo foco de desarrollo, lo que, además, permitiría frenar el avance del integrismo islámico que se nutre sobre todo de la falta de desarrollo económico, como sucede en los países donde crece más rápidamente.
Esta conjunción de circunstancias geo-económicas son las que nos ponen frente a una oportunidad histórica en la que podemos y debemos, como extremeños responsables no sólo pensar, sino proponer ideas y alternativas que posteriormente deben ser estudiadas en profundidad.
Extremadura puede y debe jugar un papel fundamental en la nueva articulación logística de la Península Ibérica. Que las mercancías que lleguen y salgan de los dos nuevos macro-puertos de Sines y Tánger, lo hagan a través de un eje u otro de comunicaciones dependerá de la rapidez y de la complementariedad que cada una de las posibles alternativas ofrezcan a las empresas de transporte.
Existen dos opciones para comunicar por carretera el puerto de Sines, y en general de toda el área económica de Lisboa, con Europa; la opción Norte que partiendo por la A-1 pasa por Castelo Branco y Guarda a través de la A-23 y entra en España por Fuentes de Oñoro y Ciudad Rodrigo (Salamanca), y la opción Sur que utilizando la A-6 portuguesa entra en España por Badajoz y, en el puerto seco previsto, dirigirse hacia el norte a través de la futura autovía Badajoz-Cáceres, conectando allí con la Autovía de la Plata A-66.
Para el de las mercancías con destino o procedencia en el nuevo puerto TangerMed, hay tres alternativas: el corredor Mediterráneo que utilizaría la autopista del Mediterráneo; el corredor central que pasaría por el área de Madrid; y el corredor oeste que utilizaría, desde Sevilla, la Ruta de la Plata. Que se desarrollen más o menos cada una de estas alternativas, dependerá de que sepamos articular una Red de Centros Logísticos y medios de comunicación que faciliten el flujo de mercancías y personas
Por motivos económicos y sobre todo por razones ecológicas y medioambientales se va a iniciar en Europa un rápido incremento del transporte de mercancías por ferrocarril. Esa circunstancia favorecerá el corredor Oeste de la Península, ya que existe, aunque actualmente abandonada, la infraestructura ferroviaria que corre paralela a la Autovía de la Plata.
XPERO ES QUEx, además, estamos en un periodo en el que la articulación del transporte y de la logística, como Joaquín Coello decía, se realiza de forma coordinada entre los distintos sistemas de transportes, a través de los llamados Centros Intermodales . Un Centro Logístico Intermodal es aquel en el que se articulan los trasvases de mercancías entre diferentes sistemas de transportes: carretera, ferrocarril, aéreo o marítimo. Son grandes áreas de servicio en las que la manipulación e identificación de las mercancías se realiza de forma informatizada, permitiendo la rapidez y la trazabilidad (identificación) de los intercambios.
La coexistencia en Extremadura de los distintos sistemas de transporte que articulan de Norte a Sur y de Este a Oeste la Península, le confieren una oportunidad real de ofrecerse como corredor de las comunicaciones para este intercambio de mercancías que tanto va a potenciarse. Es por todo ello por lo que cobra una importancia trascendental dónde se sitúen infraestructuras tan importantes como el Aeropuerto Internacional, las estaciones del AVE, cuyo corredor tiene el acertado carácter de haber sido proyectado también para mercancías, y la finalización de autovías pendientes como la de Badajoz-Cáceres.
De esa forma integrada, se podrán encontrar más fácilmente la complementariedad que tienen inversiones como el Puerto Seco de Badajoz, con un posible Centro Intermodal en Cáceres y otro de similares características en Plasencia (si la autovía que llegará a la frontera de Portugal se enlaza con la red de autovías del país vecino), todos ellos se potenciarían entre sí.
Se trata, por tanto, de hacer un verdadero Plan de Infraestructuras que integre y tenga en cuenta estas variables. De estas decisiones dependerá nuestro anhelado desarrollo futuro.
*Director de Catelsa
