Escritor

Leo en este periódico las declaraciones del presidente de la Real Academia Española sobre Vázquez Montalbán, que era un "buen" poeta, un "gran articulista" y un "buen" novelista. La academia, como siempre, si no eres almirante, no terminas de caerle bien, y Pérez Reverte seguro que no es de la cuerda de De la Concha, que es un hombre oscuro donde los haya. Y dicho esto, esta columna no puede dejar pasar la muerte de Vázquez Montalbán; era, sin lugar a dudas, la cabeza más importante de este país a la hora de dar una imagen de cualquier acontecimiento, por una razón de peso: Vázquez Montalbán además de la ironía tan fantástica que tuvo, que es lo más importante de un escritor, porque es en la ironía donde el ser humano no actúa de Caín, era además un hombre con una información de primera mano totalmente excepcional, y algo que no se ha dicho, un referente todos los lunes desde la columna de El País, o la que tenía en Interviú. La de El País te servía de faro y hasta de amuleto. Entre sus muchos haberes, Vázquez fue uno de los creadores de aquella gran revista Siglo XX, donde se rompieron los moldes de la gráfica y de las ideologías, pese a que Triunfo se mantenía en gran escaparate y donde Vázquez también escribía firmando como Sixto Cámara, y en Hermano Lobo, donde este que suscribe también tuvo sus publicaciones firmando como Frankenstein.

Era un hombre de pocas palabras, pero lacerantes y certerísimas. Tuve con él breves charlas, algunas por teléfono, y me consideró desde nuestro primer encuentro en que le pedía un poema para una obra mía, concretamente El hombre que fue a todas las guerras. En esta cuesta abajo que nos lleva la vida a las personas decentes, que no tenemos nada que rascar, su muerte ha empañado mis ojos, porque no sólo lo admiraba, sino que esta admiración iba más lejos y su muerte nos deja en clara orfandad, aunque alguno esté ahora muerto de risa.

Yo lo voy a echar de menos, porque Manolo fue algo más que un "buen" esto o lo otro. En la academia hubiera estado mejor que usted, señor De la Concha. Y con más mérito.