El pasado mes de noviembre, Tamara Corcobado Sánchez, miembro del Grupo de Investigación Forestal de la Universidad de Extremadura, defendió en el Centro Universitario de Plasencia su Tesis Doctoral titulada Influencia de Phytophthora cinnamomi Rands en el decaimiento de Quercus ilex L y su relación con las propiedades del suelo y las ectomicorrizas , que trata el tema de la enfermedad de la seca en las encinas.

La realización de esta tesis doctoral surge a través de un proyecto de convenio con el Gobierno de Extremadura, en el que se analizaron 420 focos en los que había la enfermedad de la seca . "A partir de ahí es cuando surge mi trabajo, con un estudio más intensivo, con más parámetros que medir y en el que elegí 96 encinas, tanto de la provincia de Cáceres como de Badajoz y que estuvieran presentes en diferentes situaciones, como de sequía o de abundancia en agua", explicó Tamara Corcobado.

En esos 96 focos, lo que se hizo fue recoger muestras, de manera que se relacionara la presencia del patógeno Phytophthora cinnamomi , que es la que provoca que se pudran las raíces. Eso se hizo tanto en encinas que tenían síntomas de decaimiento como en otras que no los tenían. "Y también estudiamos la relación que tenía el suelo en el que estuvieran las encinas con la infección del patógeno o si el ganado, la presencia de vehículos o si el suelo es compacto o no, pues afecta a las raíces del árbol y lo hacen más débil cuando está el patógeno presente o no", señaló la defensora de la tesis.

La conclusión que se saca de la tesis es que el principal causante del decaimiento de la encina es el patógeno Phytophthora cinnamomi y que luego hay otros factores como el suelo, la humedad de éste, la densidad de las raíces o la textura de la arena del suelo "que también pueden ayudar a que el patógeno se expanda antes y la encina muera más rápido", subrayó Corcobado.

La defensa de la tesis, que estuvo dirigida en todo momento por los Doctores Alejandro Solla Hach y Gerardo Moreno Marcos, le salió "bastante bien". Además, es una de las más novedosas, y la primera que se defiende en Extremadura y que está centrada en el estudio de la enfermedad de la seca , porque "hemos defendido cosas que antes no se habían hecho, como el estudio de esta enfermedad en situaciones de invernaderos que hemos creado para comprobar como actúa el patógeno", señaló Tamara Corcobado.