Decenas de vecinos siguieron con curiosidad, con satisfacción unos e indiferencia otros, la retirada del escudo con el águila de san Juan y una placa conmemorativa de la visita del Franco al poblado de colonización -independizado de Badajoz en 2012-, ambos vestigios de la dictadura mantenido en la fachada del palacio municipal. Fue así por decisión del anterior gobierno local, dirigido por el entonces popular Antonio Pozo, ahora de Vox, que se ha opuesto en todo momento a la desaparición de la simbología franquista y a retirar Del Caudillo del nombre.

El nuevo gobierno salido de las pasadas municipales, del PSOE, encabezado por Francisco Moreno, ha llevado a cabo la operación de retirada cuando cumple cien días, y tras ratificar el Tribunal Superior de Extremadura (Tsjex) una sentencia favorable a la demanda que presentó estando aún en la oposición. El PP recurrió al Supremo, que confirmó el fallo y el Tsjex lo ratificó el 10 de septiembre.

Los operarios comenzaron a desmontar las placas a las 8.00 horas ante vecinos curiosos, y tuvieron que llevar un camión pluma mayor porque el escudo pesaba mucho y podía caerse, explicó Moreno. De este modo, dijo «se cumple la Ley de Memoria Histórica», como prometió en campaña. La retirada «se ha hecho un día laboral, con normalidad», añadió. Ambos elementos están ya en el almacén municipal a la espera de saber dónde deben depositarlos.

Ahora, el ayuntamiento tramita la eliminación del apellido Del Caudillo al nombre de Guadiana. «Eso es un proceso administrativo; intervienen la diputación, la universidad, la Academia y ha habido periodo de alegaciones hasta el 10 de septiembre». Moreno afirmó que «de 2.200 censados, hay 130 alegaciones que llevarán al próximo pleno», dijo.

El equipo de gobierno ya lo ha retirado de los nombres de la casa de la cultura, de los centros de transportes, de día y del cementerio. Aún quedan las indicaciones de carreteras, que en la mayoría tienen Del Caudillo tachado.

TESTIMONIOS / Entre los vecinos había expectación, pero muchos no quisieron pronunciarse sobre la retirada de las placas. Vecinas que se encontraban en la plaza, que prefirieron no dar sus nombres, coincidían en manifestar que «nos da igual, nosotras no hablamos de política».

Ana, una joven madre, sí afirmó que «estoy muy conforme con que los hayan quitado; estábamos apareciendo en todos sitios como un pueblo profranquista y no queremos estar sonando por eso. La historia es la que es y no te puedes enorgullecer de ensalzar a un dictador, ni el pueblo tiene por qué perder subvenciones».

Otros vecinos, que evitaron dar sus nombres, afirmaron que «a mí me da igual». Joaquín, en cambio, expresó que «yo estoy más cómodo que la leche». Otro residente, que pidió mantener el anonimato, indicó que «el PSOE lo que debería hacer es quitar el nombre del Caudillo de una placa que tienen a raíz de una visita de Vara a Guadiana del Caudillo; allí sigue».

El exalcalde, Antonio Pozo lamentó la acción del gobierno local, informa Efe, «no me extraña la premura porque los socialistas no tienen otra cosa»; o que «la placa conmemora la inauguración de un pueblo». Y dijo que «en tres años y medio serán repuestas».