La empresa municipal Transportes Urbanos de Mérida ha decidido pagar 60.000 euros como indemnización a un conductor de autobuses que fue despedido de manera improcedente, según consta en un fallo judicial.

En la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx), se le ofrecía a la empresa la posibilidad de readmitir a este trabajador.

CCOO considera "injustificable e inadmisible" que una empresa pública como la de Transportes Urbanos de Mérida decida pagar las costas del juicio y los 60.000 euros, "cantidad que procede de los impuestos de todos los emeritenses", antes de que el trabajador vuelva a la plantilla, "y así el coste sería cero".

Desde CCOO se señala también que este "desprecio hacia el capital humano de una empresa deja mucho que desear de sus dirigentes".