La alcaldesa de Montijo, Mercedes Molina, viajó recientemente a Madrid donde fue recibida por la ministra de la Vivienda, María Antonia Trujillo, a quien le hizo entrega personalmente del proyecto elaborado por el ayuntamiento para la recuperación de la judería de la localidad.

Existen pruebas documentales de que la judería nueva de Montijo existió y estuvo ubicada en el extremo oriental del pueblo. En el siglo XV la formaban la calle Miradero (Santa Ana), Atrás (Esteban Amaya), plaza de Santa Clara, Peñas, plaza de Bravo Murillo y Acuinco.

"Como todavía hoy pude apreciase, la calle Peñas y la plazoleta de Bravo Murillo, son sinuosas y estrechas, con una rinconada sin salida en lo alto de la plazuela", comenta Antonia Gómez Quintana, la archivera municipal y autora del proyecto.

"Las casas son pequeñas y estrechas, de tapial, con una planta y pocos huecos al exterior, propios del urbanismo oriental", explicó esta experta.

El proyecto presentado pretende la revisión de las posibilidades de la judería, entendida como uno de los espacios públicos de mayor significación de la localidad, lo que se procurará mediante una operación de tratamiento que integre dentro del mismo ámbito y revalorice edificaciones de mayor representatividad, entre otras, el convento de Santa Clara, la Hermandad de Labradores y algunos ejemplos de casas de labriegos de notables características.

Algunas obras También prevé la racionalización de los distintos niveles altimétricos de las aceras y de su ámbito, con el objeto de procurar mediante un acuerdo natural entre los niveles proyectados y las rasantes primitivas, la adecuación de la misma al tráfico peatonal y rodado, y la acentuación de sus posibilidades como espacio público, soporte de actividades relacionadas con la convivencia y el ocio.

En cuanto al soleamiento, se estudia la colocación de elementos vegetales, que produzcan sombra. Las calles que se verán afectadas son: Peñas, plaza Bravo Murillo, Felipe Checa, Ibáñez Marín, Avenida Emperatriz Eugenia y Ebro.