El Día de la Luz, Fiesta de Interés Turístico Regional desde 1997, reunirá mañana en Arroyo de la Luz (Cáceres) a 160 jinetes y amazonas, así como siete carrozas temáticas, que recorrerán los 900 metros de la llamada "Corredera", en un desfile en el que participarán más de 400 personas.

El municipio espera reunir a 15.000 personas en este festejo que se lleva a cabo desde el siglo XIII y rememora, según la leyenda, el día que la Virgen de la Luz intercedió para ayudar a las tropas de Alfonso IX, en la lucha contra el ejército árabe.

Desde entonces, cada Lunes de Pascua los arroyanos celebran la festividad de la que se convertiría en su patrona y que el año pasado fue elegida la mejor fiesta de España en un concurso lanzado en las redes por el conglomerado audiovisual Atresmedia.

Se trata de una fiesta de carácter religioso y fervor para los habitantes de la localidad y visitantes, que comienza a primera hora de la mañana del Lunes de Pascua con una solemne procesión desde la iglesia parroquial de la Asunción hasta la Plaza de San Sebastián, según explicó recientemente la alcaldesa, María Isabel Molano.

Posteriormente, al recorrido se suman carrozas y caballerías que acompañan a la virgen hasta su ermita.

El momento más destacado de la fiesta y el que despierta mayor interés y emoción entre los presentes, son las famosas carreras de caballos, que se suceden a partir de las doce del mediodía entre la plaza de San Sebastián y la calle Corredera.

En estas carreras, jinetes individuales o en parejas, ataviados con trajes típicos, corren a gran velocidad entre las miles de personas que "asisten entusiasmadas al evento. Los visitantes siempre se sorprenden del sentimiento y tradición que se vive en este día", ha precisado la alcaldesa.

En este sentido, la regidora arroyana ha subrayado que aunque se está de celebración, "no hay que perder de vista que se trata de un festejo que entraña un riesgo para los presentes, que tienen que tener presente ciertas medidas de seguridad como nunca dar la espalda al lugar desde donde se da la salida de los caballos".

Por este motivo, Arroyo ha diseñado un dispositivo de seguridad compuesto por 200 personas, con agentes de la Guardia Civil, Policía Local y diversos servicios médicos, así como un puesto del Servicio 112 con un coordinador sanitario a nivel regional.