Uno de los temas más comentados en la ciudad en las últimas semanas es si sus vecinos podrán disfrutar esta temporada de verano de las piscinas municipales, teniendo en cuenta las circunstancias sanitarias actuales.

Ya han sido varias las ocasiones en las que el alcalde trujillano, José Antonio Redondo, ha tenido que hacer frente a esta pregunta, a la que siempre ha contestado haciendo referencia a la prudencia y a la evolución de la crisis.

Esta semana, manteniendo el mismo discurso, el edil ha mostrado en su comparecencia la intención de abrir la piscina municipal «para tomar el sol y bañarse, eliminando el uso de vestuarios».

Del mismo modo, considera que será necesario delimitar turnos y personalizar el bono para poder controlar el acceso y el aforo a las instalaciones, que ya se están preparando para su utilización.