La Cueva Natural de Castañar de Ibor amplía y mejora su centro de interpretación, que incluye la recreación de una pequeña porción de la cueva y un audiovisual estereoscópico en tres dimensiones.

La inauguración de la ampliación de este centro contó con la presencia del consejero de Industria, Energía y Medio Ambiente, José Luis Navarro; la alcaldesa del municipio, Ana María Irala; el presidente de la Diputación de Cáceres, Juan Andrés Tovar, y el director general de Gas Natural-Unión Fenosa Renovables, Javier Serrano.

La actuación se realiza gracias al impulso de Gas Natural-Unión Fenosa y se ha desarrollado durante un año por la empresa ACR con un presupuesto de 220.000 euros.

Se han renovado todos los contenidos del centro, se ha construido una nueva recreación de la cueva y se ha instalado una pequeña sala para poderla ver en tres dimensiones mediante unas gafas especiales, según explica José Antonio Zuazo, representante de ACR.

La ampliación del centro de interpretación permitirá revitalizarlo, por cuanto la cueva fue visitada en grupos pequeños por unas 10.000 personas entre 2003 y 2008, pero desde ese año las entradas se restringen a actividades científicas, académicas y divulgativas dado su precario equilibrio natural.

Ana Alonso-Zarza es profesora de Petrología de la Universidad Complutense de Madrid y lleva casi 8 años trabajando en la cueva cacereña, a la que considera "una joya natural, un sitio único", una singularidad que ha provocado que se interese por ella más de un investigador extranjero.

Tras llevar 20 daños impartiendo clase, Alonso-Zarza afirma que la Cueva Natural de Castañar de Ibor es "un ejemplo didáctico único", tanto por la belleza de sus espeleotemas como por la cantidad de procesos geológicos que se están produciendo en ella en la actualidad.

La cueva ubicada en Los Ibores empezó a formarse hace 400.000 años, pero en la actualidad sigue transformándose, "hay aragonito que se está transformando en calcita, hay aragonito que se está transformando en dolomita, la variedad de procesos es inmensa", asegura la profesora universitaria.

En su intervención, el consejero de Industria, Energía y Medio Ambiente destaca "la enorme fragilidad que tiene esta cueva", un complejo equilibrio que ha obligado a tomar la medida de dar marcha atrás y no permitir las visitas restringidas a su interior.

"Ojalá podamos volver a permitir la entrada, aunque sea en unas condiciones muy estrictas", señala Navarro, que tuvo el privilegio de visitar la cueva hace unos años.

La imposibilidad de que los ciudadanos visiten ahora la cueva ha impulsado la mejora del centro de interpretación, que cumple el doble propósito de "garantizar la perdurabilidad de la cueva y hacer que haya más visitas al centro", destaca b, director general de Gas Natural-Unión Fenosa Renovables.

Navarro subraya que "estas cuevas tienen que ser un elemento especialísimo de la dinamización turística de la zona", una dinamización que el presidente de la Diputación de Cáceres ha vinculado también a la futura declaración por la Unesco de la zona de las Villuercas como Geoparque.

La cueva fue descubierta en 1967 por Máximo Alonso, que fue invitado al acto de hoy pero que no pudo acudir, y fue en 1997 cuando fue declarada Monumento Natural, declaración de la que sólo gozan cuatro lugares en Extremadura.