La Audiencia Provincial de Cáceres condena al que fuera alcalde de la localidad cacereña de Santa Cruz de Paniagua entre 2003 y 2011, Ángel Cervigón (PSOE), a ocho años y medio de inhabilitación para cargo público por un delito de prevaricación, por llevar a cabo contrataciones al margen de la ley de contratos. Según se recoge en la sentencia, Cervigón contrató a su hijo para que llevara el mantenimiento de la piscina y a su hija para que cubriera las vacaciones de la que era alguacil, sin oferta pública y sin darles de alta en la Seguridad Social. Hizo lo mismo con los hijos y el marido de la alguacil. Además es propietario de una empresa de autobuses con la que contrató varios viajes para el ayuntamiento, también sin expediente alguno ni concurso público. La Audiencia le absuelve de los delitos de malversación de caudales públicos y del delito de negociaciones prohibidas a funcionario público de los que se le acusaba. Absuelve también a la alguacil y al secretario del ayuntamiento, acusados de los mismos delitos.