Los vecinos de El Batán -pedanía de Guijo de Galisteo- festejarán varios actos que se desarrollarán desde hoy viernes y hasta el domingo con motivo de su fiesta popular La Charanga. Una tradición que se celebra desde el año 1975 y que está en trámite con el fin de que sea declarada de Interés Turístico. Así lo explicó ayer el concejal de Cultura, que señaló que esta celebración se enmarca dentro del carnaval, «el más temprano de Extremadura, incluso de España», manifestó, al mismo tiempo que animó al público a asistir a este evento que este año tiene como charanguero 2019 a Juan Carlos Blázquez, que se encarga de organizar los actos.

Respecto a éstos, comenzarán hoy viernes a las diez de la noche horas con un campeonato de dardos y, seguidamente, tendrá lugar el pregón con el consiguiente chupinazo del inicio de fiestas a lo que se sumará el reparto de pañuelos. La jornada del sábado comenzará las nueve de la mañana con un desayuno y se continuará con pasacalles y el reparto de perrunillas y aguardiente, ambientado con la música de la charanga Los Despistaos. Después se jugarán campeonatos de tute, de petanca y la tirada de la soga. Habrá además una comida de convivencia y por la tarde la suelta del cochino. Ese día se finalizará con una fiesta nocturna.

Por otro lado, el domingo se vivirá una jornada similar y además se complementará con juegos para los más pequeños, que podrán disfrutar de castillos hinchables. También se oficiará una misa y se celebrará la tradicional comida charanguera. Otro de los momentos esperados llegará a las cinco de la tarde con el gran desfile del carnaval con premios a los mejores disfraces en individual, por pareja o trío y también por grupo. La programación concluirá con el nombramiento del Charanguero 2020.

El concejal de Cultura recordó que la fiesta de La Charanga fue fundada hace algo más de cuatro décadas por los alumnos del colegio Nueva Extremadura de la pedanía con el objetivo de animar el ambiente de la calle, ya que, según apuntó, «en aquellos entonces solamente habían transcurrido cinco años desde la fundación del poblado y se carecía de fiestas con arraigo propio». Respecto a la figura del charanguero, es el encargado de organizar la fiesta con todo lo que conlleva, desde buscar financiación, hasta asistir y acompañar cada evento que se realiza y nombrar al charanguero del año siguiente. Puede ser cualquier persona que viva, tenga arraigo o empresa en el pueblo y se le otorga la porra, similar a un bastón de mando que le otorga el mandato.