Nos hemos quedado sin nada". Jaqueline, de 19 años, no podía reprimir ayer las lágrimas, pocas horas después de que un incendio destruyera por completo el hogar donde vive con sus padres, de 48 y 45 años, y tres hermanos (su gemela de 19 años, otro chico de 17 y una menor de 6), en Arroyo de la Luz. El fuego comenzó parece que a causa de un cortocircuito en la terraza de la vivienda anexa al salón, donde algunos enseres apilados por la familia para bajarlos al sótano acabaron alimentando las llamas. Se da la circunstancia de que la familia, que regenta el bar Casa Juan, tenía previsto entregar el viernes la llave de este negocio porque dada la actual crisis no iba bien.

El incendio se desató a la una de la madrugada del viernes al sábado, cuando únicamente estaba en la casa el hijo de 17 años, que no pudo hacer nada. De hecho, resultó intoxicado por el humo y fue atendido por una unidad sanitaria del Centro de Salud de Arroyo, que también asistió a la madre cuando cayó al suelo sobresaltada por la situación. Las llamas entraron rápidamente en el salón y acabaron afectando a toda la vivienda. "Mi madre sigue en estado de shock, al final se la ha llevado una ambulancia al hospital de Cáceres. En esa casa estaba todo lo que teníamos", lamentaba ayer Jacqueline desde la vivienda de un allegado. Sus dos hermanas están con una amiga de la familia, y su hermano con otra.

El incendio se ha producido en un edificio conocido como las 28 viviendas, en una segunda planta. Dos dotaciones del parque del Sepei extinguieron las llamas apoyados por la Guardia Civil. La familia solicita el apoyo que pudieran prestarles desde cualquier instancia, debido a la complicada situación en la que les ha dejado este percance.