El presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, visitó ayer en Navalmoral de la Mata las instalaciones de la Asociación de Minusválidos del Campo Arañuelo (Amca), en las que trabajan 105 personas con discapacidad.

Ibarra destacó el avance logrado en los últimos años por las personas con discapacidad y recordó que cuando el Gobierno regional asumió competencias en la materia sólo existían 18 centros especiales de empleo en Extremadura, frente a los 148 existentes en la actualidad, que dan trabajo a 1.396 personas.

En el acto no estuvo, como se esperaba, el expresidente del Gobierno, Felipe González, pero sí el exsecretario de Estado de Seguridad, Rafael Vera, amigo del presidente de Amca, Antonio Redondo. Ibarra ironizó sobre ello y dijo que la prensa especularía sobre "quién le ha roto la mandíbula a Felipe González" y "a qué ha venido Vera a ver a su amigo Ibarra, para que le deje un despacho para un atentado".

Redondo dijo que González e Ibarra son quienes más han hecho por los discapacitados y definió a Rafael Mateos como "el alcalde de la accesibilidad" por haber trabajado junto a su equipo en la eliminación de barreras.