El equipo de gobierno municipal trabaja en estos momentos para eliminar las barreras arquitectónicas que impiden el acceso a las dependencias municipales a personas con movilidad reducida, según ha confirmado a este diario el alcalde, Francisco Javier García Béjar.

En este sentido el regidor municipal añadió que en un espacio de tiempo corto van a comenzar los trabajos encaminados a construir una rampa en la zona del jardín municipal, más próxima al que hay ubicado en la contigua Casa de la Cultura.

Para la ejecución del proyecto, que tiene un coste inicial de 40.000 euros, la Diputación Provincial aportará 22.000 euros.

Posteriormente deberá ser instalado un ascensor, que permita subir hasta la planta superior del edificio municipal a las personas que tienen dificultades para las escaleras que hay tanto en el exterior, como en el interior de la casa consistorial. Precisamente el número de escalones es tan elevado que se cifra en varias decenas hasta alcanzar la última planta del edificio.

El alcalde ha asegurado que la accesibilidad del Ayuntamiento «ya la teníamos prevista en el programa electoral que presentamos a los pencones, con motivo de las últimas elecciones municipales», celebradas en el mes de mayo de 2015.