El alcalde de Trujillo, José Antonio Redondo, afirmó que no existe "ningún retraso" en las obras de adecentamiento y peatonalización de la antigua carretera N-V, que va desde el polígono industrial La Dehesilla hasta la ermita de San Lázaro, ya que está dentro de un plan bianual 2006-2007 que se firmó con el Ministerio de Fomento. De esta forma, Redondo salió al paso de las críticas realizadas por el portavoz del PP, Alberto Casero, quien denunció hace unos días el retraso de estas obras de mejora.

El alcalde trujillano señaló que las actuaciones no comenzaron el año pasado porque "no era conveniente crear una dificultad más como tenemos el tema viario". Además, argumentó que no era una prioridad, puesto que están dentro de plazo de ejecución. En este sentido, matizó que si hubiesen sido "electoralistas, como a veces nos acusan", los trabajos hubiesen comenzado antes de las elecciones, pero "sin embargo, no lo hemos hecho", dijo.