El juzgado de Violencia de Género de Elche, en colaboración con la fiscalía, ha abierto diligencias contra un hombre de unos 50 años por un supuesto caso de maltrato a su hija de 19 años, con la que tiene un bebé que ha cumplido 15 meses y que, por tanto, ella alumbró cuando aún era menor de edad.

El hombre fue detenido el miércoles después de que una vecina encontrara a la joven llorando junto a su casa, con el bebé en brazos y con un ojo amoratado. El supuesto maltratador fue detenido por la policía gracias a la denuncia de una mujer que relató lo ocurrido. Lo que nadie podía pensar es que el arrestado no solo ejercía de pareja de la muchacha, sino que también era su padre y del bebé de esta.

El caso tiene tantos flecos inusuales que desde el Juzgado de Violencia de Género ni siquiera saben si es un asunto de su competencia o si ha de tratarse por otro órgano judicial, como un caso de abuso familiar, al ser los actores padre e hija, o como violencia de género, al mantener ambos una relación desde hace, al menos, dos años.

Vistos los hechos descritos en la denuncia, así como el parte de lesiones y el informe del forense, el juez decretó una orden de alejamiento como medida cautelar y lo puso en libertad.

La joven pasó buena parte de su infancia bajo tutela de la Generalitat valenciana al quedar en desamparo después de que su padre ingresara en prisión para cumplir una condena de ocho años por tráfico de drogas. Tras quedar en libertad, el hombre contactó con su hija, supuestamente a través de las redes sociales. Hacía más de un lustro que no se veían y la joven tenía ya 16 años, por lo que acordaron un primer encuentro para retomar la relación familiar.

Posteriormente, la menor abandonó el piso tutelado de la Generalitat y se trasladó a vivir de nuevo con su progenitor e iniciaron una relación sentimental. Fruto de ella se quedó embarazada. Con 17 años dio a luz a una niña. Ambos reconocieron que la pequeña es de ambos, aunque en el Registro de Elche figura la muchacha como madre soltera.