La ciudad de Mérida inauguró ayer el primer monumento del país dedicado a la Guardia Civil, una escultura hecha por cuestación popular del periódico ABC y que servirá de homenaje a los Antonio Lancharro Reyes (natural de Monesterio) y Carmelo Bella Alamo (de Granja de Torrehermosa), dos guardias civiles extremeños fallecidos en el atentado de ETA en Madrid, en la Plaza de la República Dominicana, el 14 de julio de 1986. La escultura, realizada por Santiago de Santiago, simboliza un gran tricornio y está ubicada en la rotonda de la Avenida del Duque de Ahumada, junto a la Academia de Tráfico de la Benemérita en la capital extremeña.

En el acto estuvieron presentes la consejera de Presidencia, Casilda Gutiérrez, el alcalde en funciones de Mérida, Pedro Acedo, y el autor del monumento. Durante la inauguración, se descubrió una placa y el monumento fue vendecido por los vicarios Pedro Jiménez y Sebastián González. Además, hermanos de los dos guardias civiles extremeños fallecidos en aquel atentado colocaron una corona de laurel en reconocimiento a esos agentes y se escuchó el himno de la Benemérita.

Tras la inauguración del monumento, Dolores Bella, hermana del agente Carmelo Bella Alamo, explicó que estaba "emocionada y muy contenta porque, tras veinte años, gusta este reconocimiento", pese a que "te quedas sin una parte de tí, pero reconfortan estas cosas, que la gente lo recuerde tras veinte años".

En este sentido, Juan Luis Lancharro Reyes, hermano de Antonio Lancharro Reyes, afirmó que "por lo menos, alguien se acuerda de él, y siempre estará en el corazón". Sin embargo, lamentó que el terrorista José Ignacio de Juana Chaos "se esté paseando libremente por las calles". Recordó que su hermano perdió la vida hace 21 años, y mostró su deseo de que "los terroristas paguen por lo que hicieron".

Por su parte, la consejera de Presidencia destacó la importancia que tiene la Guardia Civil para la región, ya que más de 2.500 agentes "garantizan nuestra seguridad, que es uno de los derechos más importantes de los ciudadanos porque, estando seguros, podemos ejercitar los derechos establecidos en nuestro ordenamiento jurídico, principalmente en la Constitución".

Acedo, a su vez, manifestó su "satisfacción y orgullo" por que la capital emeritense tenga este monumento único en el país.