El conductor del Alvia que descarriló el pasado miércoles en Santiago de Compostela, Francisco José Garzón, ha sido dado de alta y trasladado esta mañana a la comisaría de policía. El maquinista está acusado de 78 delitos de homicidio por imprudencia desde el jueves por la noche, cuando un policía acudió al hospital a leerle sus derechos y comunicarle que estaba detenido, pero que permanecería en el centro hasta recibir el alta medica.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que esta mañana ha visitado Santiago para agredecer y alabar personalmente la "brillante" actuación de la policía nacional, tanto en la tragedia, como posteriormente en la investigación, contó que el maquinista será puesto a disposición judicial antes de finalicen, este domingo por la tarde, las 72 horas que marca la ley.

"Indicios de delito"

Durante la visita del ministro del Interior a la curva de A Grandeira donde descarriló el tren, declaró que el maquinista está detenido porque hay "claros indicios racionales para creer que pueda tener una responsabilidad eventual en lo sucedido". El ministro ha acudido esta mañana al lugar del accidente acompañado de la ministra de Fomento, Ana Pastor.

Fernández Díaz ha contado nada más iniciar su comparecencia que el maquinista, que el viernes se negó a declarar ante la policía cuando fue a interrogarle, y que permanecía ingresado en el Hospital Clínico de la capital gallega, ha sido trasladado a la comisaría tras recibir el alta médica.

El ministro ha explicado que continúan las laborales de retirada del convoy siniestrado, justo en el momento en el que otro tren circulaba a la altura del que sufrió el accidente. "Ahora pasa un tren. Este es un momento importante", ha dicho Fernández Díaz en alusión a los trabajos para recuperar el servicio ferroviario en la zona.

En su visita a la zona, los ministros han estado acompañados por el delegado del Gobierno en Galicia, Samuel Juárez; el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, y el presidente de Renfe, Julio Gómez-Pomar, entre otras autoridades y mandos policiales.

La comitiva, posteriormente, se ha trasladado al complejo del Sar, donde se encuentran cada vez menos familias de las víctimas mortales.

Hasta el momento ya han sido identificados 75 cadáveres de los 78 que se han contabilizado hasta el momento, y solo faltan tres por identificar. Además, una treintena de restos humanos ya están en los laboratorios de la policía científica en Madrid y en Instituto de Medicina Legal de Madrid para que se les hagan pruebas de ADN que determinen si corresponden a fallecidos o son de otras víctimas no contabilizadas. En cualquier caso, no más de dos. El comisario de la policía científica, Antonio del Amo, aseguró confiar que los trabajos duren pocos días. "Dependen de la calidad de los ADN para realizar los cotejos", añadió.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, presente también en la comisaría de Santiago ha subrayado que tanto el Gobierno central como el gallego tienen "todo el interés del mundo" en analizar, concretar y esclarecer las causas de este suceso. "Por la memoria de los fallecidos, de sus familias y de las víctimas, conoceremos toda la verdad", dijo.

"Los operarios deben cumplir los requisitos"

Por su parte, la ministra de Fomento, Ana Pastor, ha dicho que el sistema ferroviario español "cumple todos los requisitos de seguridad recogidos en el ordenamiento jurídico español y europeo" y "los operarios tienen que cumplir esos requisitos", y la investigación tiene que aclarar si se cumplieron dichas normas.