La gran distancia que existe entre las cofradías del norte y del sur de Galicia volvió a evidenciarse ayer. Mientras los marineros de La Coruña llegaron a un acuerdo con la Administración por el que percibirán un sueldo por limpiar el fuel, los de las Rías Bajas rechazaron el convenio, porque las pagas no tienen carácter retroactivo, no cubren la labor del personal que trabaja en los muelles y no garantiza la llegada de nuevos medios para afrontar la limpieza con algo más que las propias manos.

En todos los puertos de la Costa de la Muerte, a excepción de Corme y Camariñas, los marineros decidieron ayer no salir a la mar a pescar el maldito chapapote. Tras una reunión con varios representantes de la Administración central, los patrones mayores de las cofradías de La Coruña salieron satisfechos. A partir de hoy, todos los marineros que limpien, tanto en tierra como en el mar, cobrarán un sueldo limpio de 36 euros diarios (unas 6.000 pesetas). El armador recibirá 60 euros por su embarcación y otros 36 si se enrola como tripulante.

TRAGSA, RELEGADA

Todo el personal estará asegurado y serán las propias cofradías las que organicen los turnos de limpieza y elaborarán las listas. También recibirán y distribuirán los salarios, en función de las jornadas trabajadas. De esta manera, la empresa pública Tragsa ha vuelto a quedar relegada. Esta era una de las grandes reivindicaciones de las cofradías: excluir a Tragsa del reparto de sueldos. Los marineros entendían que la empresa no tenía por qué beneficiarse de su trabajo.

La satisfacción en las cofradías del norte contrastó con la indignación en las cofradías de las Rías Bajas. En una reunión celebrada a última hora de la tarde, rechazaron la oferta. Así, seguirán pescando el chapapote con sus barcos y sus manos, pero sin cobrar.

"Nos siguen mareando y vuelven a dividirnos. Nunca les pedimos dinero, pero si nos quieren pagar, perfecto, pero que lo hagan bien. En las rías no hay costa que limpiar, por tanto hay marineros que deben estar haciendo labores en los muelles. ¿Quién les paga a éstos? No es justo", aseguró el patrón mayor de Bueu, José Manuel Rosas.

En los muelles de las Rías Bajas el malestar crece. En O Grove, Cangas y Pobra do Caramiñal los patrones mayores siguen en huelga de hambre y el miércoles enviaron a la Delegación del Gobierno, otra vez, la lista de los medios que reclaman. "No deben haberse enterado todavía", aseguró indignado Manuel Maneiro, patrón de Pobra do Caramiñal.

DISCUSIONES

Por si fuera poco, ayer mismo confirmaron en las Rías Bajas que el seguro de los barcos que Salvamento Marítimo les había garantizado cubre los incidentes por "actividad pesquera". Algunas cofradías discutían anoche si saldrán hoy a faenar. "Que nos digan que pescar fuel es una actividad pesquera y podremos limpiar tranquilos", aseguró Rosas.