No tenía permiso de circulación porque nunca se lo había sacado. Aún así decidió robar un vehículo en la localidad cacereña de Miajadas para desplazarse a la ciudad. Ocurrió en el mes de marzo del año pasado y aprovechó que el propietario del coche, un Citroen Saxo, se había dejado las llaves puestas al aparcarlo junto a su domicilio. Se montó en el turismo y comenzó la huida.

Fueron unos vecinos los que alertaron a la Guardia Civil, que instaló un control en la carretera EX 206, concretamente en el kilómetro 35. El control estaba perfectamente señalizado con los indicativos y distintivos del cuerpo pero, al darse cuenta de que los agentes le hacían señales para darle el alto, desobedeció las indicaciones y decidió acelerar el automóvil para huir. Lo que no quería era enfrentarse a los agentes porque carecía del carnet de conducir.

En la huida, uno de los agentes que se encontraban en el control tuvo incluso que dar un salto para evitar ser atropellado. A partir de aquí comenzó una persecución para intentar retenerlo pero los vehículos oficiales no consiguieron alcanzarlo debido a la “altísima” velocidad que llegó a alcanzar. Provocó situaciones de pánico con varios de los vehículos con los que se cruzó, que tuvieron que apartarse para evitar daños. No respetaba ninguna señal de velocidad.

La persecución se prolongó durante varios kilómetros. En varias ocasiones realizó maniobras en zigzag para evitar ser detenido, llegando a invadir el carril contrario, provocando que los vehículos oficiales y otros tuvieran que apartarse para evitar que chocara contra ellos. Al llegar a la localidad cacereña de Torrequemada los agentes lograron retenerle al cruzar uno de sus vehículos delante del que este conducía. Terminó estampándose contra un muro.

El Juzgado de lo Penal Número 2 de Cáceres le condena a seis meses de prisión por un delito de conducción temeraria y a la retirada del carnet (que no tiene) durante tres años. Además debe pagar una multa de 360 euros por el delito de desobediencia a la autoridad y 72 días de trabajos en beneficio de la comunidad por el delito de hurto y de conducción sin licencia. Debe también indemnizar al propietario del vehículo por los daños causados. La sentencia es firme.