Un grupo de investigadores y expertos médicos internacionales --entre ellos de la UE y de Brasil-- pidieron ayer la prohibición de la publicidad televisiva sobre comida basura durante los horarios de máxima audiencia infantil, para prevenir la obesidad entre los niños y jóvenes. Más de la mitad de los anuncios sobre alimentos que se emiten en las cadenas de televisión corresponden a productos no saludables, según un estudio llevado a cabo en 12 países, entre ellos España, y presentado hoy en el XVII Congreso Europeo sobre Obesidad, celebrado en Amsterdam.

La publicidad de productos alimenticios constituye entre el 11 y el 23% del total de anuncios televisivos, y de éstos, más del 53% corresponden a productos considerados no saludables. La publicidad de productos no saludables aumenta durante los horarios de máxima audiencia infantil, y la mayoría contiene "elementos de mercadotecnia persuasivos", como personajes, ofertas y otras promociones, afirman los autores del estudio.