La apuesta que Antena 3 TV realizó en septiembre del 2001 con el programa Maldita la hora le ha salido mal por partida doble: además de fracasar en su intento de desbancar a Crónicas marcianas (Tele 5), ahora, casi dos años después de su suspensión, el juzgado de Primera Instancia número 35 de Madrid ha condenado a la cadena privada a indemnizar a la directora del show , Amelia Alas, con 204.344 euros (34 millones de pesetas), según informó El País . Este montante es lo que le hubiera correspondido cobrar por dos años de contrato. A-3 anunció ayer su intención de recurrir el fallo judicial.

La cadena privada presentó Maldita la hora como su arma secreta para acabar con el reinado de Xavier Sard en las noches de lunes a jueves. Y para ello fichó a Máximo Pradera, que hasta entonces había hecho gala de un fino humor, un tanto alocado, al frente de Lo más + , en Canal+, y que también había tenido un programa de música en radio. Pradera utilizó desde el principio una estrategia de agresividad contra el director y presentador de Crónicas marcianas , al que, pocos días del estreno de su espacio, calificó en una entrevista en EL PERIODICO de "tiburón loco de sangre". No obstante, y tras 12 días de emisión, A-3 retiró Maldita la hora , que sólo había conseguido de media un exiguo 10.9% de cuota de pantalla, frente al 36,8% logrado en aquellas fechas por el todopoderoso Xavier Sard .

EN EL ´TALLER´ DESDE EL 2001

Manuel Villanueva, entonces director de contenidos de Antena 3 Televisión --y ahora, curiosamente, con el mismo cargo en Telecinco--, aseguró entonces que Maldita la hora se retiraba a lo que él vino en denominar "el taller" para introducir los cambios pertinentes para volver a emitirlo a su debido tiempo, y que Máximo Pradera seguiría en la cadena con otro espacio. Ni el show volvió ni el presentador tuvo otro.

Ante los reiterados incumplimientos, Amelia Alas denunció a Antena 3 TV, condenada ahora a pagarle su sueldo como si el programa no se hubiera retirado. Máximo Pradera también presentó denuncia, aunque su caso no se verá en los tribunales hasta abril del próximo año.