Un informe de Caixa Catalunya asegura que el incremento de las comisiones en los últimos años se puede explicar como consecuencia de un proceso iniciado a principios de los noventa, un cambio que se debe, entre otras cosas, a la evolución del modelo bancario, que actualmente tiende a trasladar a cada cliente las gestiones que requiere, cobrando comisiones por muchos conceptos que antes eran totalmente gratuitos. Además, los expertos responsables del estudio destacan que buena parte de la expansión de las comisiones se explica por el significativo crecimiento de la actividad financiera.

Actualmente España no es uno de los países en los que los servicios bancarios resultan más caros. En este sentido, la banca española se encuentra en línea con la europea y por debajo del cobro que realizan por sus servicios las entidades financieras de países como Estados Unidos o el Reino Unido, donde las comisiones suponen incluso más del doble de las que se están aplicando en nuestro país.

Por otra parte, las asociaciones de consumidores y usuarios insisten en que a los clientes de un banco les interesa saber cuánto les cobra su entidad financiera por los servicios.