La puesta en marcha de la denominada ley antitabaco en sus actuales términos causaría pérdidas por valor de más de 50 millones de euros anuales a los hosteleros extremeños, al tiempo que pondría en peligro cerca de 700 empleos. Esos son los cálculos que maneja la Federación Española de Hostelería (FEHR), que ha elaborado un informe basado en la experiencia de otros países según el cual los bares, cafeterías y restaurantes de más de 100 metros cuadrados --los afectados por la norma-- perderán el 8% de su facturación actual.

Uno de los principales problemas del proyecto de ley reguladora de la venta, el suministro, el consumo y la publicidad de los productos del tabaco es que obliga a todos los locales de ocio --como restaurantes, bares y cafeterías-- de más de 100 metros cuadrados a realizar una importante reforma que permita habilitar un espacio independiente y con ventilación para fumadores (un máximo del 30% del establecimiento) o a prohibir el consumo de tabaco. Esto debe aplicarse desde el 1 de enero del 2006 --la ley no prevé un periodo de aplicación progresiva-- y los empresarios aseguran que en la práctica la mayoría no afrontará el coste de estas obras.

El presidente de la Confederación de Empresarios de Turismo de Extremadura, Gerardo Barredo, cree que "serán muy pocos" los que adapten sus locales --exceptuando los establecimientos que se dedican a la organización de grandes eventos-- tanto por la inversión necesaria como porque sería como "levantar celdas" independientes para fumadores. A esto se suma que el coste de las reformas alcanzará entre 1.500 y 2.500 euros.

EFECTO DIRECTO Esto supondrá, aplicando el texto actual de la normativa, que en casi todos los bares, cafeterías y restaurantes de más de 100 metros cuadrados estará prohibido fumar, mientras que en los que tengan una superficie inferior será el empresario el que decida.

A la hora de analizar la repercusión de esta medida, la Federación Española de Hostelería explica que un estudio realizado hace unos años, en base a las experiencias de otros países europeos, revelaba que la prohibición de fumar provoca de forma directa un descenso de la demanda de al menos un 8% en un sector que en Extremadura factura 2.700 millones de euros (82.000 millones de euros en España). En todo el país hay actualmente unos 60.000 establecimientos hosteleros de más 100 metros, de los que más de 2.000 están ubicados en Extremadura.

Con todos estos datos sobre la mesa, la Federación concluye que la aplicación de la ley antitabaco en sus actuales términos provocaría en el sector hostelero la pérdida de 1.600 millones de euros anuales, una cifra que en Extremadura se situaría en los 55 millones de euros. Por lo que se refiere a la destrucción de empleo, la FEHR asegura que esta norma destruirá en torno a 20.000 empleos, cerca de 800 en la comunidad extremeña.

VALORACION REGIONAL Gerardo Barredo explica que, a través de la FEHR, ya se han presentado las enmiendas pertinentes a este proyecto legislativo. Entre otras cosas, el sector reclama que se cambie el actual porcentaje máximo para zona de fumadores, de forma que el espacio donde se prohíba el consumo pueda reducirse hasta el 30% (actualmente el proyecto lo fija en el 70%). Asimismo, reclaman que se incluya un periodo transitorio para que los empresarios puedan adaptarse de forma paulatina y no tengan que afrontar en tan poco tiempo las inversiones que requerirán los cambios. No en vano en Extremadura el coste de estas reformas en todos los locales supondría un gasto de entre 3 y 5 millones de euros en sólo seis meses.

Tampoco están de acuerdo en que si alguien fuma en un lugar donde está prohibido sea el empresario el que tenga que pagar sanciones que oscilan entre los 601 y los 10.000 euros.

Barredo espera que durante la tramitación parlamentaria de la ley "se tengan en cuenta estas y otras cuestiones" porque "es un verdadero problema y no tengo claro cómo va a terminar esto". De hecho, está convencido de que, al menos a corto y medio plazo, las pérdidas superarán el 8% registrado en otros países "por el carácter que tenemos los españoles". En otras regiones ya se ha dado la voz de alarma y, por ejemplo, en Asturias los empresarios dicen que están "en peligro" 7.600 negocios.