Justo cuando el debate sobre la financiación autonómica entra en su recta final (el plazo fijado por el Gobierno para definir el nuevo modelo expira el 15 de julio), este tema reabrió ayer las discrepancias entre el Gobierno extremeño y la oposición. Su máximo representante, José Antonio Monago, rechazó las propuestas de Vara de vetar cualquier referencia al esfuerzo fiscal y exigir, como mínimo, que Extremadura mantenga la tercera posición en financiación per cápita.

"No me conformo con eso", proclamó Monago, que abogó porque la región mantenga el porcentaje de fondos que recibe, es decir, "que si la financiación fuese un queso, el trozo que le corresponde a Extremadura siga pesando lo mismo", ejemplificó. Además, el presidente del PP propuso que se compense a la región por la pérdida de población y auguró que esta saldrá beneficiada con el nuevo modelo, pero menos que otras.

Por el contrario, Vara criticó que los populares pretendan ahora incluir la "huella ecológica", algo que según dijo ya ha puesto él de manifiesto y lo sigue haciendo, por ser ahora una "ocurrencia" que, de añadirse a la posición de Extremadura a estas alturas, le restaría "coherencia". En todo caso, el presidente extremeño se comprometió a "defender los intereses de Extremadura por encima de cualquier otro interés partidario" y se sorprendió por que Monago sepa cómo afectará a la región el nuevo modelo cuando él aún no ha decidido qué votará.