Ahora que comenzamos el año 2016 es un buen momento para reflexionar sobre la importancia de comenzar de nuevo. Seguro que durante el año pasado hubo muchas cosas importantes que dejamos de hacer y que por lo tanto tenemos que recomenzar.

Recuerdo un libro de Jesús Urteaga que se llamaba precisamente: “Ahora comienzo” es un libro apasionante que nos ayuda a comenzar cada día con ilusión, a recomenzar las actividades que habíamos dejado, a levantarnos y a continuar con el camino cuando las dificultades se acrecentaban. Jesucristo en el camino del calvario cae tres veces y tres veces se levanta enfrentándose a dificultades extremas. Jesucristo es un ejemplo vivo de cómo debemos aceptar las dificultades y enfrentarnos a ellas.

Y siguiendo con Jesús Urteaga, decir que era un sacerdote del Opus Dei, apasionante, enamorado de la vida, vasco de nacimiento, nacido el 7 de diciembre de 1921 y que fue durante los años sesenta presentador de un programa de TV1 que se denominaba: “Siempre alegres para hacer felices a los demás”. Era un programa dedicado a los jóvenes y muchos engancharon con la forma de actuar y de pensar de este joven sacerdote; este sacerdote vibrante, entusiasta que caló en el corazón de muchos; muchos jóvenes y menos jóvenes, muchos hombres y mujeres, que -con él- aprendieron a seguir a Jesucristo.

En 1965 le fue concedido el Premio Nacional de Televisión Española. Jesús Urteaga se nos fue al cielo hace unos años pero nos queda: su testimonio, su grandeza de corazón, sus libros y su vida llena a rebosar de entusiasmo. En este principio de año os animo a seguir a Jesucristo superando todas las dificultades, con perseverancia, con decisión, con esperanza y con el ejemplo puesto en tantos y tantos Santos que han sabido hacer que su vida un extraordinario testimonio. De Jesús Urteaga recuerdo otros libros como “Dios y los hijos” “Cartas a sus hombres” y “El Valor divino de lo humano” este último para mí es un libro fascinante en el que se nos ayuda a vivir el cristianismo de una manera arrolladora, vitalista.

Además se nos enseña que el cristianismo no se vive solo en la iglesia sino más bien fuera de ella: en la calle, en el estudio, en el trabajo, entre los amigos, en la diversión, en la familia y en el mundo. Si quieres ser buena persona, si quieres ser un buen ciudadano, si quieres ser un buen trabajador y tantas otras cosas acude a estos libros lleno de amor a Jesucristo, lleno de amor a los hombres y mujeres y lleno de amor a la vida, una vida espectacularmente bella. Y para terminar feliz 2016 y feliz encuentro diario con las realidades cotidianas, con las alegrías y con las dificultades, con las esperanzas y con las tristezas, con lo agradable y con lo desagradable. Siempre y en cada momento feliz 2016.