El presentador de televisión Xavier Sard no rodará finalmente en Cuba uno de los capítulos del nuevo programa de viajes, Dutifri , que está preparando para Tele 5. Sard compareció ayer en rueda de prensa, celebrada en el Colegio de Periodistas de Barcelona, para desvelar el largo y frustrado proceso --desde el 31 de octubre-- para que él y su equipo lograran el visado con el que entrar en Cuba. "Si las autoridades no querían que entrara en Cuba, me lo podían haber dicho directamente", explicó, antes de sentenciar: "Si ahora me dan el visado, que se lo pongan de pajarita. No voy a ir a Cuba".

Irónico, incisivo y locuaz, como si se tratara de un show más de Crónicas marcianas , Sard rompió el silencio para puntualizar las oscuras negociaciones con la embajada cubana, que sigue reiterando que no ha prohibido la entrada del periodista en la isla. "Puede ser verdad que no me hayan negado la entrada, sino que han demorado el visado porque no querían que fuésemos allí", aclaró.

Desalentado por la posición de los diplomáticos cubanos, explicó que el consejero de prensa de la embajada cubana, Rubén García Abelenda, respondió a los productores --en una conversación telefónica--, que todo dependía del Gobierno de Fidel Castro. "No creo que el señor Sard ni ustedes merezcan ir a Cuba. El señor Sard en su programa Crónicas marcianas criticó en varias ocasiones a nuestro presidente, a nuestro país y a los cubanos".

Como réplica, Sard no quiso echarse tampoco atrás esta vez. "En Cuba hay una dictadura total y absoluta", espetó, para matizar: "Con las personas soy extremadamente respetuoso, con las ideas, no". Recordó que, en la filmación de los capítulos de su nuevo programa (EEUU, Brasil, Emiratos Arabes, Japón, Filipinas, Venezuela, Tailandia, India, Israel y Rusia) solo han tenido problemas en Cuba. "Pero que no nos hayan dado el visado para mí es la máxima distinción del Gobierno cubano".

Aun sin buscarlo, esta polémica ayuda a la promoción gratuita del regreso de Sard a Tele 5. Lo hará en prime time pero "sin pensar en la audiencia". Digeridos los excesos de ego por la fama que le dio Crónicas marcianas , Sard no disimuló el privilegio de su nueva propuesta, algo contradictoria. "Ya no me gusta viajar--confesó--. Pero con este programa, Tele 5 me permite el antiturismo, viajar con personas que te llevan al meollo de cada ciudad".