Desde el norte

La sociedad civil vuelve a hablar

Habrá que estar atentos al MSU-Norte porque no va a esperar en un sillón a que Extremadura prospere

Raquel Rodríguez Muñoz

Raquel Rodríguez Muñoz

Estamos acostumbrados al inmovilismo, a que nos den las cosas hechas y a votar cada cuatro años si queremos cambiar las cosas, si es que cambian, y en contadas ocasiones se ve a diferentes colectivos unidos y reclamando con contundencia mejoras. Son contadas las manifestaciones en la calle por una u otra causa y, casi siempre, tienen un sesgo político que las tergiversa o desvirtúa su sentido.

Pero en la zona norte de Extremadura ha resurgido un movimiento que antaño era local, placentino y que logró tal fuerza que consiguió que se ampliaran las carreras universitarias en la capital del Jerte. Ahora, aquel Movimiento Social por la Universidad se ha reconvertido en MSU-Norte y, aunque está dando sus primeros pasos, ya muestra una unidad y determinación a tener en cuenta.

El ejemplo más visible ha sido una comparecencia pública en la que, en torno al exdirector general de Turismo de la Junta de Extremadura, Francisco Martín, estaban los principales representantes de cinco instituciones empresariales de calado: la Cámara de Comercio de Cáceres, los círculos empresariales cacereño y placentino, Pymecon y la Federación Empresarial Placentina.

Anuncia el MSU-Norte nuevas comparecencias con más colectivos, como las universidades y otros culturales, sociales medioambientales o vecinales. Busca ser un organismo fuerte, que represente a la que se llama comúnmente la sociedad civil y, con Martín al frente, seguro que dará guerra.

Lo más importante es que, en poco tiempo, ha conseguido aglutinar muchas voluntades y que huye del cariz político para centrarse en un objetivo, la reclamación de mejoras para la zona norte de Extremadura y, por extensión en algunos casos, para toda la región.

Como ejemplo, la recuperación del tren Ruta de la Plata, prioritariamente del tramo Plasencia-Salamanca y su agilización para que sea una realidad en el horizonte del 2030 y no del 2050.

«Hay que ponerle precio a esos pañales», decía el presidente del Círculo Cacereño en rueda de prensa esta misma semana, en alusión a las desafortunadas aunque realistas palabras del ministro Óscar Puente sobre el estado del trazado del tren Ruta de la Plata. 

Conociendo a Martín, habrá que estar atentos al MSU-Norte porque no se va a conformar ni a esperar en un sillón a que Extremadura prospere. 

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