La asociación El Defensor del Paciente ha enviado una carta al presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, en la que solicita que intervenga en el control del suministro del tabaco a un enfermo psiquiátrico ingresado en el Centro Socio-Sanitario de Plasencia.

En esta misiva, la asociación expone la situación de un paciente de 48 años con "enfermedad psiquiátrica diagnosticado de esquizofrenia paranoide residual", que además es un "fumador compulsivo", por lo que es necesario controlarle el tabaco dándole un cigarrillo "cada media hora e incluso a veces alguno más, ya que, si se le da el paquete para su autoadministración, se fuma los cigarrillos seguidos sin control alguno, habiendo dado lugar a varios ingresos hospitalarios por asfixia", tal y como ha puesto en conocimiento de la asociación un hermano de esta persona.

Según indica el escrito de la asociación El Defensor del Paciente con información del hermano, este paciente fue trasladado desde el Centro Socio-Sanitario de Mérida, al Centro Residencial de Rehabilitación (CRR) de Plasencia "de forma voluntaria" y "allí se ha desenvuelto satisfactoriamente hasta hace unas dos semanas", cuando este paciente padeció una "crisis de agresividad por motivos que no vienen al caso, pero ajenos al consumo del tabaco" y tuvo que ser ingresado de urgencia en el Centro Socio-Sanitario de Plasencia.

Según datos del hermano, en el CRR, se ha respetado su situación y se le ha administrado ese cigarrillo cada media hora como se venía haciendo habitualmente en el Centro Socio-Sanitario de Mérida por el personal de enfermería y auxiliares de este centro.

Sin embargo, al ingresar en el Centro Socio-Sanitario de Plasencia, "no le han respetado su situación particular" debido a "las normas que tienen allí" y que consisten en que "a cada enfermo fumador se le da un paquete de tabaco por la mañana y nada más a lo largo del día, independientemente de los hábitos de consumo personales".

Por otra parte, se da a conocer que "no se le ha facilitado la administración por parte del personal del centro, a pesar de que el pasado día 10 la familia advirtiera a su psiquiatra durante la entrevista que les hizo para completar su historial de las características especiales del paciente como fumador compulsivo".

Según el hermano, este facultativo les "mintió, afirmando que se le administraba el tabaco", ya que, al parecer, la familia advirtió en una visita que "no estaba sedado", pues el comportamiento hacia su familia se produjo con "gran agresividad fruto, en gran parte, de su ansiedad por el tabaco".

"La ley del Tabaco, hecha con gran hipocresía, parece que se permite fumar en los hospitales psiquiátricos pero, según nos confirma y asegura el hermano de este paciente, con severas restricciones, no se puede fumar en el centro, tampoco en la cafetería ¿Por qué dicen que en estos centros se puede fumar? Solo se puede fumar en el patio, haga frío o calor, y teniendo que soportar la insistente y molesta presencia de multitud de enfermos que te piden tabaco una y otra vez en el horario de visita de 16.00 horas en adelante", ha destacado la Asociación El Defensor del Paciente.

La presidenta de la asociación, Carmen Flores, termina la misiva al presidente del Ejecutivo regional solicitándole que "se tomen las medidas oportunas para subsanar esta situación con este y demás pacientes". "Estamos seguros de que usted es uno de los políticos más comprensivos y "normales" con la ciudadanía del panorama nacional".