El Ayuntamiento de Plasencia decide la compra de un perro pastor alemán que, adscrito a una unidad canina de la policía local (de nueva creación), se utilizará para luchar contra el 'trapicheo' de drogas en los entornos escolares, especialmente en los institutos.

El alcalde, Fernando Pizarro, ha confirmado que el presupuesto municipal de 2012, que ya se está elaborando y que espera que se apruebe a finales del mes de diciembre en sesión plenaria, incluirá una partida de entre 2.000 y 3.000 euros que será destinada a la adquisición de un perro que, posteriormente y de forma previa a su utilización, será entrenado por las unidades especializadas de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

El animal tiene ya asignado un funcionario de la Policía Local, que se encargará de su cuidado y de efectuar las labores de vigilancia a la entrada y salida de los alumnos de los centros escolares y durante las horas de recreo.

El primer edil y concejal de Educación ha subrayado que la creación de esta unidad canina ha sido propuesta por el intendente de la policía local, Enrique Cenalmor, y que su puesta en marcha ha obtenido una "excelente" acogida por parte de los directores de los institutos placentinos "que me habían transmitido en varias ocasiones su preocupación por el trapicheo de drogas a las puertas de los centros educativos" y así conferir más seguridad a la comunidad educativa. Además, el alcalde ha defendido que la eficacia de este tipo de unidades ha sido constatada "in situ" por el concejal de Interior, Tráfico y Distritos, José María Nisa, que se desplazó personalmente hasta el municipio madrileño de Coslada para conocer de primera mano la forma de trabajar de la unidad canina de la policía local de la localidad.