Antaño eran unas de las fiestas con más público y ahora, la renovada Asociación de Vecinos El Pilar-Plaza de Toros ha querido recuperar el que es el emblema del barrio, el coso taurino, para una fiesta que acaba hoy.

Así, si el viernes la plaza de toros se convirtió en el terreno de juego para un torneo de fútbol sala y una competición de petanca, también acogió la discoteca móvil y hoy, habrá actividades infantiles y la celebración del Pilar de la Amistad, además de la entrega de trofeos de las actividades deportivas y una pancetada para los socios y vecinos.

El presidente vecinal, Javier Jiménez, está muy satisfecho con la acogida del barrio a las fiestas y justifica así el uso de la plaza de toros: "Yo pienso que no podemos tener un monumento para usarlo solo cuatro días al año. Hay que darle uso y antiguamente las fiestas se hacían en la plaza. Como el tiempo nos ha acompañado, la directiva acordó que mejor al aire libre que en un sitio cerrado. Queríamos relanzas las fiestas y nuestra referencia es la plaza de toros".

Esta semana y precisamente con motivo de las fiestas del barrio, la directiva lo visitó junto al alcalde, varios ediles y responsables de las empresas de limpieza y jardines. De esa visita salió el compromiso por parte del ayuntamiento de atender una antigua reivindicación del barrio, el arreglo de la calle que discurre desde el inicio del acueducto (calle Fuero) hasta la sede vecinal.

El alcalde explicó que el gobierno hará una senda peatonal paralela al acueducto y ha consensuado con los vecinos los detalles del proyecto. Fernando Pizarro calcula que costará entre 150.000 y 200.000 euros y que los trabajos podrán comenzar a primeros del 2014.

La directiva vecinal ha aplaudido esta obra, aunque Jiménez considera que "llega algo tarde porque el año pasado apenas ha habido actuaciones en el barrio y, como empezarán el próximo, este año va a pasar también sin hacernos nada".

Su otra reivindicación histórica, el arreglo de la calle situada tras el Alpemar, dijo el alcalde que quedará solucionada con el nuevo Plan General Municipal. "La solución llegará porque lo que se ha plasmado en el plan general es que, cuando se urbanice la parcela situada junto al Alpemar, quienes lo hagan tendrán la obligación de arreglarla", explicó Pizarro.