Lo pidió la Gerencia del área de salud y, tras hablar con la consejería y la Dirección General de Salud Pública, el Ayuntamiento de Plasencia ha tomado la determinación de mantener una presencia policial permanente en tres zonas de la ciudad donde los positivos han ido aumentando en las últimas semanas.

Se trata de la avenida Pablo Iglesias, del barrio de Los Mártires y de la urbanización Unifamiliares La Data. El alcalde, Fernando Pizarro, mantuvo ayer una reunión con la Policía Local y Nacional para coordinar los controles policiales que se van a llevar a cabo y también ha mantenido conversaciones con los presidentes de las asociaciones de vecinos para explicarles la situación y pedirles su colaboración.

Porque no habrá cierres perimetrales en estas zonas, pero sí una presencia policial «permanente» y también «controles puntuales» en los que la policía pedirá documentación a los vecinos.

En este sentido, Pizarro ha explicado que el objetivo es que las personas contagiadas, que deben permanecer aisladas en sus domicilios, lo cumplan y para eso, Salud Pública facilitará un listado de los positivos a la policía.

Un vecino observa un cartel con las normas covid, en un portal de Pablo Iglesias. TONI GUDIEL

Además, de cara a este fin de semana, se va a mantener la presencia policial en el centro de la ciudad para evitar aglomeraciones e incumplimientos de la normativa, por lo que «se han ampliado los turnos de la policía con personal de refuerzo».

Deber de hacerse test

Sin embargo, Pizarro ha subrayado que, además del refuerzo policial, «lo que prima es la responsabilidad de cada uno». Ha recordado que, inicialmente, el ayuntamiento pidió test y «ahora están ahí y tenemos que utilizarlos para saber dónde están los contagiados».

Por eso, ha subrayado que el sometimiento a test debe considerarse «como un deber». A la vez que, «una vez diagnosticados, hay que cumplir las normas de aislamiento, con eso podríamos contener el avance del virus».

Preocupa que la incidencia haya subido en los últimos días (280,61 a los 14 días a fecha del martes y 170,37 a los 7 días) y también la presión hospitalaria (18 hospitalizados ayer, tres de ellos en la UCI).

Por eso, el alcalde ha advertido que el objetivo es «salvar vidas, pero también salvar la vida económica» porque, si siguen aumentando los contagios, «se podrían tomar medidas de cierre perimetral, de la hostelería y el comercio y no estamos dispuestos a llegar a eso. No quiero tener la misma mala suerte de otras poblaciones».

Además de pedir responsabilidad personal, ha solicitado a las autoridades sanitarias que «avance la vacunación porque es una herramienta fundamental».