La finalidad de las operaciones de tesorería, a las que están recurriendo la mayoría de los consistorios para garantizar su liquidez, son para necesidades transitorias. No obstante, el consistorio de Cáceres las viene renovando desde hace tres lustros, y en los últimos años hasta niveles que se acercan al límite legal de endeudamiento para estas operaciones a un año, situación en la que influye que el consistorio debe anticipar dinero de inversiones que Europa pone después cuando la obra está pagada.

Para operaciones a largo plazo, de más de un año, se está lejos del límite legal. No obstante, el PSOE viene insistiendo desde hace tiempo en que hace falta un plan de saneamiento que mejore la situación actual de las arcas locales, ya que estiman que se ha entrado en una dinámica peligrosa de operaciones de crédito a la que no ven salida. Desde el PP se subraya que la situación es otra y que es mucho mejor a la que encontraron en 1995 cuando el ayuntamiento estaba casi en suspensión de pagos.