El próximo 10 de marzo comenzará a apagarse la televisión analógica en la ciudad de manera progresiva. Y el 3 de abril nadie podrá verla. Sin embargo, la emisión de la TDT en Cáceres aún tiene deficiencias. De hecho, el mayor enemigo es la recepción de la señal, ya que, según explican los instaladores de antenas, aunque los usuarios cuenten con repetidores de calidad, muchos de ellos tendrán problemas para ver la televisión porque la cobertura no es suficiente y la señal es uniforme.

"El problema de la TDT es que la ves o no la ves. En la analógica podía verse con niebla, pero se veía, sin embargo la digital no. Por lo que cuando la señal se reciba mal, los cacereños no podrán verla o la verán pixelada", indicaron desde la instaladora eléctrica, Altomp.

Además, según explicó el gerente de Antenas Gallego, Alfonso Gallego, "quedan muchas zonas oscuras", haciendo referencia a que varios lugares de la ciudad (como Aguas Vivas, Llopis Ivorra, Camino Llano, Miralrío, Colón o Hernández Pacheco, entre otras) aún no tienen la instalación hecha. "Parece como si no se hicieran a la idea de que la televisión se apagará el día 3 de abril. No son conscientes de que a partir de ese día no podrán verla", dijo Alfonso Gallego, que incidió en que si el apagón se hiciera definitivamente el 10 de marzo sería casi imposible.

La tercera y última fase del proceso de transición a la TDT afectará a 233 municipios y a 838.566 ciudadanos extremeños, lo que ha incrementado durante las últimas semanas la venta de codificadores en la región.