Muchos conductores han sufrido este medio día atascos poco usuales en varias calles y avenidas de la capital cacereña. Las obras de asfaltado en la Ronda Norte, así como los trabajos en otra artería de la ciudad, Gil Cordero, han provocado, sobre todo a la salida de colegios, institutos y trabajos, importantes retenciones en la avenida Ruta de la Plata, Rodríguez de Ledesma, Virgen de Guadalupe y calles adyacentes, que se tradujeron en quejas ciudadanas en las redes sociales.

El consistorio inició el pasado martes una nueva campaña de asfaltado de viales en siete barrios. En concreto, se está trabajando en la glorieta de la Ronda Norte en el cruce con la carretera de Casar de Cáceres, la calle Ordesa, en el barrio El Vivero, y las calles Escorpión y Orión del R-66. Además, hay obras en la prolongación de la Ronda de San Francisco, que afectará a casi 1.500 metros, la calle Zurbarán, en la zona centro, y de San Ignacio y Hermanos Romero Ruiz en El Rodeo.

Las redes sociales multiplicaron hoy las quejas de los conductores que no esperaban encontrar las avenidas colapsadas. Muchos no conocían el inicio de las obras en estos viales. Los momentos de mayor colapso de calles y avenidas se produjo a partir de las 14.00 horas, al coincidir la salida de clase de los alumnos de colegios e institutos con la hora de comer.

El grupo municipal socialista ha pedido explicaciones al equipo de gobierno ante lo que consideran un «caos de tráfico», que ha provocado «retenciones de más de tres cuartos de hora». El portavoz socialista, Luis Salaya, ha acusado de «descoordinación» al gobierno local por hacer coincidir el asfaltado de Ronda Norte y «las obras de cambio de saneamiento y abastecimiento en Gil Cordero, provocando una gran caos», informan en nota de prensa.

El Grupo Municipal Socialista pedirá al concejal delegado de Seguridad Vial, Rafael Mateos, y al concejal de Obras, Víctor Bazo, en la próxima comisión «conocer cómo se tomó esta decisión, que ha provocado un gran perjuicio para muchos cacereños», ha avanzado Salaya.

Los socialistas consideran que los cacereños «están pagando» lo que consideran una falta de coordinación del equipo de gobierno y han recordado que, «como ocurrió con las obras en Virgen de Guadalupe y la calle Viena» se ha perjudicado «a vecinos y comerciantes y en general a toda la ciudadanía».