La construcción de un carguero forestal, el diseño de una máquina de descorche automático y la puesta en marcha de un proyecto destinado a recuperar el mobiliario tradicional extremeño fueron las principales líneas de trabajo del Instituto Tecnológico del Corcho, la Madera y el Carbón Vegetal (IPROCOR) en el año 2001.Así lo explicó esta semana el director de IPROCOR, Miguel Elena, que compareció, a petición propia, ante las Comisiones de Agricultura, Ganadería y Pesca; Comercio, Turismo y Transportes, y Economía, Industria y Energía para dar cuenta de las actividades desarrolladas por el instituto el año pasado, en el que el organismo contó con un presupuesto de 1,58 millones de euros.Durante su intervención, Elena destacó el diseño y construcción de un vehículo forestal ligero, dentro de un programa europeo, que "permite moverse fácilmente dentro del bosque" y "superar pendientes de 130 grados", cuyo buena acogida ha llevado al instituto a trabajar en la creación de un segundo prototipo.Asimismo, valoró la creación de IPLA, una máquina descorche automático, y resaltó la óptima acogida del Código Internacional de Buenas Prácticas Taponeras (SYSTECODE), "al haberse pasado de 10 a 19 empresas acreditadas".En el campo de la madera, Elena informó de la ejecución de la primera fase de un proyecto de recuperación del mueble extremeño, que pretende elaborar un censo del mobiliario tradicional extremeño para crear prototipos.