La biblioteca municipal de Navalmoral de la Mata abrió sus puertas a todos los moralos hace catorce años, en el 1990. Durante sus primeros años ocupó uno de los rincones de la céntrica Casa de la Cultura, pero desde hace cuatro ocupa la primera planta del famoso y emblemático edificio conocido como Casa Comilla, en la calle Urbano González Serrano, frente al no menos conocido Jardincillo. Este lugar también lo comparte con la biblioteca de la UNED, ubicada en la segunda planta.SERVICIOSLa biblioteca está dividida en dos áreas diferenciadas, una de ellas dedicada para los más pequeños en la que pueden entretenerse leyendo multitud de libros infantiles y otra, destinada para que los adultos puedan estudiar y realizar sus trabajos de una manera tranquila y sin ruidos ni molestias.José Luis Solano, encargado de la biblioteca desde el año de su apertura, comentaba a LA CR|óNICA que "con el traslado a la Casa Comillas, las instalaciones han mejorado". Por ejemplo, la superficie destinada al estudio ha aumentado ya que si antes contaba con ochenta metros cuadrados ahora ocupa doscientos ochenta. La dotación de libros también se ha visto beneficiada con este nuevo cambio de lugar, "ahora contamos con siete mil tomos aproximadamente de todas las materias en general, a diferencia de cuando se encontraba en la Casa de la Cultura, que sólo teníamos cinco mil|", aseguraba Solano. Asimismo, la biblioteca ofrece al público prensa nacional, como El País, El Mundo o el ABC; regional, donde podemos encontrar periódicos como el HOY Extremadura o El Periódico de Extremadura y local, como La Crónica de Navalmoral. También se encuentran a disposición del público numerosas revistas con un amplio contenido cultural, regional y divulgativo.|XVERANO|xDurante esta temporada de verano ocupan los asientos de la biblioteca alrededor de noventa estudiantes diariamente, una media que se mantiene respecto al año anterior, donde se registraron unos cien aproximadamente. La mayoría de las personas que visitan las instalaciones son universitarios que acuden cada mañana a preparar los exámenes de septiembre, acompañados por alumnos de enseñanza secundaria y de segundo de bachillerato que se preparan la prueba de acceso a la universidad, también conocida como selectividad o PAU.Por otra parte, durante la temporada de invierno, y a diferencia de otros años, el número de estudiantes que visitan las instalaciones desciende bastante, siendo los más pequeños y los adolescentes los que más solicitan los servicios de la biblioteca. Así lo contaba Solano: "Ha bajado notablemente y esta ausencia de público es bastante acusada". En cuanto a los sistemas informáticos públicos o accesibles a todas las personas, la biblioteca aún carece de ellos. José Luis dice que "debería estar adaptada a los tiempos, con ordenadores públicos, internet, etcétera". Junto a él, una dinamizadora cultural, Ana, y una auxiliar, Guadalupe, ayudan al buen funcionamiento del edifico, catalogando y registrando los libros o manteniendo el orden y el silencio, aunque como contaba Solano "esto último no hace falta ya que esta gente se autoimpone el silencio y vienen a lo suyo".PRÉSTAMOSEn estos últimos años, el número de personas asociadas ha descendido, "a fecha de hoy sólo contamos con trescientos socios aproximadamente, un número demasiado bajo", decía Solano. Añadía que "antes contaban con unos dos mil y que para el préstamo de libros sólo se requiere el carnet de socio, pudiendo disfrutar de los libros prestados unos quince días y teniendo la oportunidad de renovarlos si no están demandados". Todas aquellas personas interesadas en hacerse socio sólo deberán presentar una foto tamaño carnet y aportar sus datos personales.
