Lentamente, Kylie Minogue va recuperando la salud, pero confiesa que el cáncer de pecho la golpeó "como una bomba". "Es muy duro, fue como arrojarme a otro mundo", afirma la cantante australiana en una entrevista que este fin de semana emitirá Sky One. Emocionada, sin poder reprimir en ocasiones las lágrimas, Minogue, de 38 años, revela cómo solo transcurrió un día desde el momento en que le fue diagnosticado el cáncer y su entrada en el quirófano. "Tuve un día de gracia y me fui a dar un paseo por la playa".

"Hicimos el anuncio y me convertí en una prisionera", cuenta la estrella (en la foto, el pasado día 6 en París). La convalecencia está siendo agotadora y reconoce haber tenido días en los que no podía levantarse ni hacer nada. Tras un tratamiento de quimioterapia en París, donde vive su novio, el actor Olivier Martínez, la princesa del pop trata ahora de recuperar fuerzas. B. A.