Más de 21.500 extremeños fueron sancionados el año pasado por cometer alguna infracción que conllevó la detracción de puntos de su carné de conducir. Entre todos ellos, se dejaron 69.398 puntos a causa de estas multas. Teniendo en cuenta que el censo de conductores extremeños es de 646.162, la proporción de los que cometieron este tipo de infracciones fue del 3,3%. Por provincias, conforme a los datos proporcionados por las dos direcciones provinciales de Tráfico de la región, en Cáceres los conductores sancionados fueron 9.356, con 29.617 puntos perdidos, mientras que en Badajoz las cifras fueron de 12.206 y 39.781, respectivamente.
En el 2016 el carné por puntos cumplió sus primeros diez años de vigencia en España, un periodo en el que las muertes en las carreteras nacionales se ha reducido a menos de la mitad. Una disminución solo empañada por la subida del pasado año, la primera desde el 2003.
Desde la DGT se ha atribuido en buena parte este descenso de los fallecimientos a la influencia del carné por puntos, al cambiar algunos hábitos de los conductores hacia comportamientos más seguro. «Ha habido otras iniciativas y es verdad que ahora hay una mayor concienciación, pero esta ha sido la medida que ha permitido reducir más la siniestralidad», coincide Francisco García, presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Cáceres.
¿Cuáles son las sanciones más frecuentes que llevan aparejada la pérdida de puntos? En sus primeros diez años, casi la mitad de las sanciones (46%) lo fueron por exceso de velocidad. «Parece que no hay forma de que se levante el pie del acelerador, sigue siendo una asignatura pendiente, pero a la que se le están sumando cada vez en mayor medida los despistes, sobre todo por el móvil», sostiene García.
Precisamente, el uso indebido del móvil al volante —junto al de otros dispositivos de sonido— concentró un 10% de las penalizaciones, siendo el tercer motivo más frecuente de retirada de puntos, por debajo de las ocasionadas por el no uso del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil (11%) pero superando a las infracciones por conducción tras haber consumido alcohol y drogas (9%). Sobre estas últimas, señala, que «parece que los jóvenes están empezando a concienciarse más» en relación al consumo de alcohol cuando se conduce, por lo que su incidencia «ha bajado de forma considerable» en los últimos años. No obstante, matiza, «también es cierto que ha habido un repunte en otro tipo de drogas», que han comenzado a controlarse en mayor medida por parte de la DGT.
SIN PUNTOS / Los conductores extremeños que perdieron todos los puntos del carné el año pasado fueron 187 en la región (80 de ellos en la provincia de Cáceres y 107 en la de Badajoz). Quienes han agotado su crédito inicial de puntos están obligados a realizar un curso de sensibilización y reeducación vial de veinticuatro horas de duración y que en la región puede realizarse en alguno de los siete centros autorizados (cuatro en la provincia de Badajoz y tres en la de Cáceres). Una vez transcurridos los seis meses que tiene de vigencia la pérdida —tres meses para los conductores profesionales—, deberá superar una prueba teórica que aborda los contenidos del curso realizado, previa cita en la jefatura de Tráfico correspondiente. «El temario es distinto en función de las causas por las que te quiten el carné de conducir: alcohol, cinturón de seguridad...», aclara Francisco García. Si aprueba el examen, el nuevo saldo arrancará desde los ocho puntos.
También es posible la recuperación parcial de puntos (en este caso con ocho centros, cinco en Badajoz y tres en Cáceres). La cifra de quienes optan por ello, indica el presidente de las autoescuelas cacereñas, «está aumentando». Conductores con parte de de su saldo consumido que «saben que se la juegan si reciben una sanción nueva porque pierden el carné y encima tienen que examinarse. No esperan a tener quitados todos los puntos».
