Un nuevo escándalo se cierne sobre Jaime Martínez-Bordiú, nieto de Francisco Franco. La Guardia Civil investiga un incidente, a las 8 de la mañana de ayer, en la rotonda de salida de la M-503 en Villanueva de la Cañada. Según el denunciante, su vehículo fue embestido por el de un conductor que hablaba por teléfono, al que identificó con el empresario. En lugar de detenerse, continuó circulando, por lo que el afectado anotó la matrícula y empezó a seguirlo. Una vez a la altura del otro coche, el conductor, Jaime Martínez-Bordiú, siempre según la versión del denunciante, le cerró el paso, le embistió varias veces y sacó una pistola por la ventanilla para intimidarle. Mientras se alejaba del lugar del incidente, oyó "lo que parecieron cuatro detonaciones", informó la policía. El suceso solo registró un percance: el golpe que sufrió el vehículo. La Guardia Civil, que investiga los hechos, ha determinado que el arma es de fogueo y ha requisado el coche de Martínez-Bordiú, quien prestó declaración ayer por la tarde en las dependencias de la policía. Este diario ha intentado ponerse en contacto, sin éxito, con el denunciado. El hecho es especialmente grave porque, según la Comandancia, Martínez-Bordiú no puede tener armas porque hace un año la Audiencia de Barcelona le condenó a un año de prisión por maltratar a su exnovia, Ruth Martínez, en Mijas, en agosto del 2007. La justicia estableció que el demandado actuó movi-do por "un elemento intencional de dominio, violencia y machis-mo", pero al carecer de antece-dentes penales eludió la cárcel.
