Fernando Luengo, del bar Rosma y miembro de la comisión de fiestas de Santa Marta, lleva 52 años elaborando la limonada que se reparte a conductores y viandantes en esta celebración patronal de la hostelería. Para la presente edición ha preparado 200 litros, que la comisión ha ofrecido a todo aquel que transitaba por la calle principal de Navalmoral, Antonio Concha, en la mañana de ayer, junto con diez kilos de dulces variados. Esta es una de las tradiciones que se repiten año tras año cuando llega la festividad de Santa Marta para homenajear a la patrona.

La fiesta se prolongó durante toda la jornada. A pesar de las altas temperaturas, más de un centenar de camareros y hosteleros participaron en la parrillada y las vaquillas que se celebraron en una finca cercana al municipio, donde los más atrevidos participaron en el tradicional concurso de bandejas.

RECONOCIMIENTOS

Ya por la noche, el gremio disfrutó de su cena de hermandad y homenajeó a algunos de los compañeros de profesión. Por su trayectoria se entregaron placas conmemorativas a Encarnación Pérez (bar Orleans) y Pilar Sánchez (hostal Gran Vía). Por marcar una época en la hostelería se rindió homenaje a Juan Carlos Sánchez y Andrés Rodríguez, del Pub 00, a Rendelsur y su distribuidor, por su colaboración, y a Marcelino Barambones (Arcos de Baram) por sus años de profesión. También se reconoció el trabajo de Zenón Sánchez y Alfonsi Mayordomo (bar la Torre).