EDITORIAL

Nueva imagen para un futuro prometedor

EL PERIÓDICO EXTREMADURA estrena diseño en una era apasionante para la región extremeña

Portada de la edición de este domingo con el nuevo diseño.

Portada de la edición de este domingo con el nuevo diseño. / EL PERIÓDICO

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EL PERIÓDICO EXTREMADURA cumple 101 años de su primera publicación y lo celebra con una imagen renovada, todo un símbolo de una apuesta por un futuro en el que Cáceres y del resto de la región extremeña deben cobrar protagonismo.

El diseño de la edición papel de EL PERIÓDICO, dentro de la pujante evolución que distingue al grupo Prensa Ibérica, al que pertenece, se distingue por su claridad y su limpieza, con el fin de que el lector acceda con mayor facilidad a los contenidos que le interesa en los que el diario seguirá apostando por la calidad y la veracidad. Los intereses de Extremadura y una clara vocación de servicio público siguen acompañando a esta renovación en el papel que se une a la ya realizada en la edición web. Dos plataformas con un único objetivo: servir de altavoz a los logros y reivindicaciones de los extremeños, pero también de lugar de encuentro en el que los distintos puntos de vista e ideologías confluyan y desemboquen en un debate destinado a enriquecer el debate democrático, frente a los enfrentamientos estériles y de la polarización.

Los intereses de Extremadura y una clara vocación de servicio público siguen acompañando a esta renovación en el papel que se une a la ya realizada en la edición web

EL PERIÓDICO DE EXTREMADURA mantiene intacta su vitola regional pero, en esta nueva etapa, quiere reforzar su vinculación con Cáceres, su cuna de nacimiento, hace ya más de un siglo. Celebramos los éxitos que dibujan un perfil moderno y competitivo de Extremadura, con todos los proyectos puestos en marcha o a punto de hacerse realidad. Como damos cuenta de otras iniciativas que pueden contribuir a dar el vuelco a un territorio injustamente marginado de la dinámica de desarrollo en otros momentos de la historia. De ahí que pongamos el acento especial en noticias como la quincena de iniciativas de sectores punteros, de las energías renovables a la industria agroalimentaria que acaban de presentar sus credenciales como nuevos inversores en Extremadura y que necesitarán el apoyo de las instituciones para asentarse y ser fuente de creación de empleo de calidad con el que fijar población.

EL PERIÓDICO EXTREMADURA enarbola la bandera en problemas de calado que requieren una acción transversal, como el reto demográfico. Cuatro de cada diez municipios de la región se encuentran en riesgo de desaparecer a consecuencia de la emigración y el envejecimiento de sus cada vez más escasos habitantes. El problema afecta especialmente a la zona norte de Cáceres, a cuyas comarcas tienen ante sí la oportunidad de ser foco de atracción para futuros inversores en el campo y como referencia del turismo de interior, un sector que cobra cada vez más protagonismo en el PIB cacereño. El turismo es ya, también, un pilar económico de primer orden para la ciudad de Cáceres. La riqueza de su patrimonio histórico artístico, reconocido por la Unesco por un casco histórico excepcional, se completa con la oferta medioambiental que rodea a la ciudad. La calidad de su gastronomía y el nivel creciente de sus infraestructuras hosteleras completan los atractivos tanto para los visitantes particulares como para la celebración de congresos. El éxito del turismo de congresos en Cáceres es tal que ya hay contrataciones para 2025, lo que significa ocupación casi plena durante todo el año. El objetivo candidatura a la capitalidad cultural europea para 2031 debe ser el hito que actúe como palanca definitiva. Que no duden los cacereños que esa aspiración tendrá en EL PERIÓDICO a uno de sus mayores apoyos.

EL PERIÓDICO DE EXTREMADURA mantiene intacta su vitola regional pero, en esta nueva etapa, quiere reforzar su vinculación con Cáceres, su cuna de nacimiento

Pero Cáceres necesita más. La capital de provincia no puede sustraerse del despegue industrial de otros núcleos como Trujillo, Plasencia o Navalmoral. Cáceres necesita disponer de suelo industrial para que alguna de esas grandes inversiones anunciadas pueda asentarse en ella. Disponer de una red de comunicaciones propia del siglo XXI es otra aspiración irrenunciable. El AVE o las autovías de conexión con Badajoz, con el sureste peninsular y con Portugal son imprescindibles, como lo es la digitalización de todo el territorio. Extremadura entra en una era de prosperidad de la que este diario quiere seguir siendo fedatario.