Música de capilla y la profunda voz de José Dávila para acompañar al Cristo de la Buena Muerte

 La excepcionalidad de esta Semana Santa, marcada por las fuertes precipitaciones, (ayer se registraron 50 mm), el viento y las bajas temperaturas, continúa marcando el calendario procesional de Monesterio.

 El Jueves Santo brilló dentro del Templo Parroquial. La Archicofradía Sacramental y Virgen de los Dolores se volvió a ver obligada a suspender la estación de penitencia con el Cristo de la Buena Muerte. La cita estaba anunciada para las 21:30 horas. Un día más la lluvia arreció y la acertada decisión de la cofradía colmó de grandiosidad el, breve, pero profundo procesionar del Crucificado bajo la bóveda de la Iglesia San Pedro Apóstol.

 Con las luces del templo apagadas, únicamente alumbrado por las candelerías de su paso procesional, el Cristo de la Buena Muerte fue guiado, al paso de los costaleros, por el angosto pasillo central de la iglesia, acompañado por la música de capilla que ofreció un magnífico trío de instrumentos de viento.

Saetas

 El silencio y el recogimiento con el que se desarrolló el acto penitencial solo se vio roto por los aplausos de quienes acudieron al templo para participar de esta cita con la Semana Santa, en gran medida, también atraídos por el anuncio de colaboración entre la Hermandad y la peña cultural-flamenca, ‘Pepe Cristo’, que para la ocasión contrató al enorme cantaor extremeño, José Dávila.

 Primero, desde el Altar Mayor. Después, frente a la capilla del Sagrario y, finalmente, frente a la imagen de la Dolorosa, la diáfana, profunda y potente voz de José Dávila y sus saetas flamencas, proyectó ese soplo difícilmente explicable de comunicación sentida y profunda entre el cantaor, las imágenes del Crucificado y la Dolorosa y el público asistente.

Viernes Santo

 La actividad cofrade del Viernes Santo incluye la procesión del Santo Entierro, que, si la lluvia no lo impide, comenzará tras los Santos Oficios de la Pasión del Señor. Por su parte, la Virgen de la Soledad tiene prevista su salida del templo a las 22 horas. En ambos casos, la previsión de lluvia ha llevado a la Hermandad a “suspender las dos procesiones”, ha confirmado la Hermana Mayor, Mariví Martínez.

 En el caso de la Soledad, tal y como viene ocurriendo durante toda la semana, el recorrido procesional se cambiará por una celebración dentro del templo, acompañada por la banda de cornetas y tambores de Azuaga. El Cristo Yacente, se “moverá” en silencio, una vez finalizados los Oficios.