El Colegio de Enfermería, el más numeroso de la provincia con 2.500 profesionales, recibió ayer una buena dosis de moral, oxígeno y estimulantes al firmar con Caja Duero su sexto convenio. La entidad se comprometió a prestar su apoyo en las actividades formativas y corporativas que cada año emprende el colegio, que no son pocas: quince cursos programados (salud laboral, hemodiálisis, urgencias...); organización de jornadas y congresos; preparación de oposiciones y otras acciones demandadas por sus miembros.

El acuerdo fue suscrito ayer en la sede de la caja por su director territorial, Antonio Sánchez, el delegado del Grupo Duero Luis Acha, el presidente del colegio, Isidro Nevado, y el tesorero, Jesús Gómez, todos impecables y muy agradecidos. Además, la caja ofrecerá a los colegiados sus productos financieros de forma preferencial (créditos, ayudas a la apertura de despachos, hipotecas...), y a cambio llegará a un buen número de profesionales.

OTRA FORMA DE ESTUDIO

Ayer también se inauguró el primer centro educacional intensivo, un servicio pionero que facilitará al alumno la atención y el seguimiento que no recibe en su hogar por el ritmo de vida actual. Se denomina Educa, está situado en Obispo Jesús Domínguez y ofrecerá clases de refuerzo, estudio vigilado, técnicas de estudio, sesiones con un psicólogo, habilidades sociales, escuela de padres, cursos mixtos de idiomas, cursos lúdico-formativos, campamentos y fiestas. "Queremos huir del concepto de academia", recordó su directora, Carolina Perales.

Por último, el instituto Agora celebró ayer una animada sesión de lectura dentro de su semana cultural. Hoy rendirá homenaje a Luis Cernuda con poemas musicados por José Santana.