En contra de lo que parecía previsible, los vecinos de la urbanización La Cañada han acogido de buen grado la apertura el pasado fin de semana de la pista de verano situada a pocos metros de las viviendas. "Después de la lucha que hemos mantenido para que no se instalara este negocio, tenemos que decir que el estreno nos ha sorprendido: no hemos sufrido ruidos, ni molestias, ni botellones ", explicó ayer el presidente vecinal, Juan Morán.

De hecho, la asociación presentó a mediados de julio una denuncia en el ayuntamiento contra el proyecto, que ahora incluso podría paralizarse. "Es una decisión que debemos tomar la directiva en pleno, y que en todo caso dependerá de lo que suceda en próximos fines de semana. Otro tema es que la pista sea legal o no, y ahí no podemos entrar ni salir", indicó Morán. El presidente ha visitado personalmente las viviendas más próximas a la pista Isla Cañada. "No hemos recibido ninguna queja hasta el momento", precisó.

Por su parte, el abogado de la asociación de vecinos La Cañada, Angel Luis Aparicio, se mostró ayer sorprendido de que el ayuntamiento haya autorizado el negocio. "Los responsables municipales saben que abrir una pista de verano en esa zona es totalmente ilegal, puesto que va en contra del Plan General de Ordenación Urbana de 1999".

Aparicio, tras recordar que existe una denuncia ante el ayuntamiento donde se argumenta el por qué de la oposición a la pista, se pregunta ahora qué técnico, a nivel urbanístico, ha informado favorablemente esta apertura, "pues habría cometido a sabiendas una ilegalidad, y contribuido a incurrir a otros en un posible delito de prevaricación". Por ello, no descarta interponer una acción penal o, como mínimo, administrativa, contra el ayuntamiento y sus responsables; así como tampoco recurrir a la Junta, "pues la pista también vulnera la Ley del Suelo".