"Yo iba tranquila por la acera. Le vi apoyado en la pared comiendo unas gominolas y tras pasar a su lado, me agarró por detrás, me cogió del cuello y me tiró contra un coche, dándome golpes en el cuello. Menos mal que conseguí meterme entre el coche y una farola y salí corriendo con un susto tremendo. Solo me dijo cuando me agarró: ¿Y tú por qué me miras?". La víctima de la última agresión, una vecina de Los Castellanos que pide mantenerse en el anonimato por temor, cuenta así lo sucedio la mañana del día 5 en la calle Miguel Serrano.

La mujer había tenido noticias de incidentes protagonizados por un vecino, pero desconocía de quién se trataba ni que pudiera ser agredida por él. El martes estaba previsto que se celebrara el juicio por la agresión, pero finalmente fue aplazado.

Ella aún tiene miedo. "Si me tira al suelo, seguro que no me escapo o, si tiene algo en la mano, me habría golpeado con ello. Y a mi no me conocía, me tocó a mi porque pasaba por allí en ese momento, pero hubiera podido ser cualquiera. Deben tratarlo y controlar que toma los medicamentos porque si sigue suelto y sin control, no voy a ser yo la última víctima".